Una aplicación móvil para reducir el número de accidentes de tráfico ocasionados por la fauna salvaje. El departamento de Biología Animal de la Universidad de Salamanca trabaja en el diseño de esta plataforma, que incluso podría implementarse en los navegadores de los coches. Su objetivo, explica el investigador Víctor Javier Colino, es "modificar el comportamiento del conductor haciendo que extreme la precaución en aquellos momentos y tramos en los que el riesgo de accidente es mayor". Según la Dirección General de Tráfico, en Asturias se producen al año una media de 500 siniestros por la irrupción de animales en la calzada.
Las colisiones con animales no se distribuyen al azar, sino que tienden a concentrarse tanto en el tiempo como en el espacio. Así, es posible identificar tramos donde los atropellos son especialmente numerosos y tienden a repetirse año tras año. "Se trataría de modelar esos patrones espacio-temporales e implementarlos en una aplicación de movilidad basada en las tecnologías de geolocalización que avise en tiempo real del riesgo de sufrir un accidente", profundiza Colino.
El equipo de la Universidad de Salamanca considera que esta aplicación tendría múltiples ventajas frente a otras medidas como la instalación de señales de peligro de animales en los bordes de las carreteras. Aunque es barata, los investigadores señalan que "los conductores tienden a habituarse rápidamente y no surte el efecto de reducir la velocidad para tener mayor capacidad de reacción". A su juicio, los vallados son efectivos, pero aumentan enormemente la fragmentación de poblaciones. Igualmente rechazan el uso de catadriópticos, espejos u orina de depredadores, de baja efectividad a largo plazo. "El dispositivo que proponemos es barato, concentra la alarma en los tramos de riesgo y no incrementa el efecto barrera", dice Colino.
La aplicación se encuentra en fase experimental a la espera de financiación para su adaptación a gran escala. Se ha trabajado en la modelización espacio-temporal de los siniestros de la red viaria de Castilla y León. Por las especies implicadas y por su proximidad, "es posible que el modelo pudiese adaptarse a Asturias, aunque lo idóneo sería hacer una personalización. Nos gustaría crear una plataforma que funcionase como un punto de encuentro entre la administración, el colectivo de cazadores y los conductores, con información de batidas de caza en los cotos", concluye.
