La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los Picos iniciarán la recuperación de su tercer lago este año con 180.000 euros

Asturias respalda el rescate del acuífero cántabro de Ándara, que podría estar listo para el centenario del parque nacional en 2018

La zona en la que estaba el lago de Ándara, en la vertiente cántabra de los Picos de Europa.

El Parque Nacional de los Picos de Europa rescatará su tercer lago, el de Ándara, coincidiendo con su primer centenario el año que viene. La Comisión de Gestión acordó en su última reunión destinar una inversión de 180.000 euros para la recuperación del acuífero dentro de un presupuesto anual de seis millones de euros. Es el primer paso firme que dan Asturias, Castilla y León y Cantabria para resucitar un lago, que se desecó entre 1915 y 1920 a causa de la intensa actividad minera desarrollada en la vertiente cántabra del espacio protegido. El Principado aplaude la recuperación del Ándara, que se sumará a los ya existentes Enol y Ercina. "El proyecto se votó por unanimidad y lo consideramos interesante", afirman fuentes de la consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales.

Los 180.000 euros destinados este año al lago de Ándara servirán para ejecutar toda la obra, que podría estar acabada en 2018. No hay que perder de vista que el año que viene se celebra el centenario de la declaración del antiguo parque nacional de la Montaña de Covadonga, que por ampliación en el año 1995 se convirtió en el actual de Picos de Europa. Esa conmemoración podría ir acompañada por tanto de la inauguración del lago, aunque fuentes del Principado desconocen los detalles. Las obras dependen del Gobierno cántabro, que fue quien llevó, después de años de intentos, la propuesta a la comisión del parque nacional.

La recuperación del tercer lago cuenta con el respaldo no sólo del Gobierno de Asturias, sino también de los expertos. La Confederación Hidrográfica del Cantábrico considera factible la obra si se taponan las zonas que se infiltra el agua. "Técnicamente es posible y, en principio, la actuación no revestiría mayor dificultad", afirma Pedro Farias, investigador de la Facultad de Geología de la Universidad de Oviedo. El lago de Ándara, con una superficie aproximada de 19.000 metros cuadrados y 325 metros de largo por 75 de ancho, se ubicaba en la majada del Redondal, cerca del casetón de su mismo nombre que hoy sirve de refugio para los montañeros y cuyo origen está ligado a la obtención de plomo y zinc que se inició en 1889 y se alargó, al menos, hasta 1929.

Plan de transporte

La consejera de Desarrollo Rural, María Jesús Álvarez, precisó ayer en la Junta General que la regulación del acceso a los Lagos es competencia de la Dirección General de Tráfico del Estado, y que el plan de transporte que impulsa el Principado sirve para "apoyar", no para "sustituir ni asumir competencias de otros organismos". Álvarez indicó que el parque destina a la regulación del tráfico en el espacio protegido 72.000 euros, un servicio que se presta "sin coste alguno para el visitante", y desveló que este año se incrementarán los efectivos, al pasar de 3 a 9 los controladores los fines de semana.

Compartir el artículo

stats