Cada año, en el Principado de Asturias mueren 4.000 personas a causa de enfermedades cardiovasculares. A la luz de unas cifras tan elevadas, y aprovechando la celebración del Día Mundial del Corazón, la Consejería de Sanidad ha hecho una serie de recomendaciones para reducir el riesgo de padecer una de estas enfermedades. Entre ellas destaca mantener una alimentación sana, ajustada al consumo energético de cada persona, y la práctica habitual de la actividad física.

En el Atlas de riesgo cardiovascular en Asturias, de 2015, se han estimado los riesgos atendiendo a la edad. Entre ellos destacan: el nivel de colesterol total, la tensión arterial y si se es o no fumador y diabético. En edades comprendidas entre los 25 y los 60 años se ha calculado que existe un 9,7% de riesgo de acontecimiento coronario (angina, infarto de miocardio o con síntomas, mortal o no) a diez años.

En personas de entre 60 y 74 años el porcentaje es un 9,9%. En todos los modelos de cálculo las mujeres tienen niveles de riesgo más bajos que los hombres.

En consideración, Sanidad recuerda que es fundamental seguir una dieta sana, rica en productos vegetales como frutas y verduras, y limitar el consumo de productos procesados y envasados porque suelen tener un alto contenido en sal, azúcar y grasa, elementos de riesgo. También recomienda no fumar, evitar el consumo de alcohol y mantenerse activo durante toda la vida.

Se aconseja además promover la salud del corazón desde todas las instancias, políticas, sanitarias, sociales y educativas. Además, destaca el papel de los ayuntamientos, que ponen a disposición de los ciudadanos espacios destinados al ocio activo.