Las chicas asturianas tienen más probabilidad de sufrir accidentes graves que los chicos, aunque ellas obtienen mejores notas que ellos en los accidentes leves -daños materiales-. Pero en conjunto, los jóvenes del Principado suspenden en la comparativa nacional por la alta siniestralidad. Estas conclusiones figuran en el "III Informe sobre la juventud al volante: Por qué es necesario ser prudente", elaborado por la patronal del seguro, Unespa.

El estudio analiza la siniestralidad entre los conductores de 18 a 35 años, que es la franja de edad en la que los seguros incluyen a los conductores jóvenes. Los que mejor circulan son los de Soria, Cuenca y Huesca, mientras que las provincias con conductores más imprudentes son Las Palmas, Cádiz, Sevilla y Málaga.

El conjunto de los jóvenes asturianos suspenden, con una nota de 2,86, cuando la calificación media nacional es de 2,99. Si se analiza la siniestralidad por sexos, apenas hay diferencias significativas entre chicos y chicas. Si el análisis se centra en los accidentes leves, aprueban ambos sexos con un 6,73. Las chicas obtienen un 7.25 y los chicos un 6,43. Pero en el caso de los sinietros graves, los hombres obtienen mejor nota, aunque sólo por unas décimas: un 2,92 frente al 2,78 de ellas.

Otro dato que aporta el estudio es que circulando por ciudad las notas de las jóvenes asturianas son un 12 por ciento mejores que las de los hombres.