Los asturianos no desayunan de la forma más adecuada, según un estudio que refleja que uno de cada tres no come ningún alimento sólido desde la cena del día anterior hasta la hora de la comida. Esta circunstancia afecta a su capacidad de afrontar el día con vitalidad.

El estudio, que aborda la relación entre diferentes hábitos de terrenos como el deporte, la alimentación o las relaciones sociales, y cómo influyen éstos en el grado de vitalidad de cada persona, revela que existe una relación directa entre la vitalidad y un desayuno adecuado. De hecho, de los asturianos que sí introducen sólidos en su desayuno, la gran mayoría (96%) evalúa su grado de vitalidad como "medio o alto".

En comparación con la muestra nacional que incluye el II Estudio de Vitalidad de Zespri, la tendencia de no introducir ningún sólido hasta la comida es más acentuada entre los asturianos (33%) que en el resto de los españoles (23,5%). Según la nutricionista Mireia Porta, "es necesario alimentar nuestra vitalidad cada día consumiendo alimentos con calidad nutricional, no olvidándonos de desayunar y dando más oportunidades a la fruta a lo largo del día".

Además, los asturianos consideran como alimento especialmente saludable la fruta fresca, destacando entre ellas el kiwi tanto en su variedad verde como amarilla. Sin embargo, sólo el 12% la introduce en el desayuno, mientras que casi uno de cada cuatro (22%) come bollería en este momento del día. Un reflejo de que los asturianos, como ocurre en la muestra nacional, conocen los grupos de alimentos saludables, pero no lo aplican en sus hábitos cotidianos de alimentación.

Test de vitalidad

El II Estudio de Vitalidad forma parte de la iniciativa Espacio Vitalidad, planteado para ayudar a la población a entrenar su vitalidad y que cuenta con el aval de un amplio grupo de expertos en campos como la alimentación, el ejercicio físico o la psicología.

Como parte de este proyecto, se ha creado un test para medir el grado de vitalidad de cada persona, accesible en www.espaciovitalidad.es, y en el que cada persona puede encontrar su nivel de vitalidad así como acceder a recomendaciones para mejorar su grado de vitalidad, en función de sus resultados.