La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El "Brexit" deja entre dudas el futuro de los ya escasos enlaces aéreos de Asturias

El grupo de Iberia y Vueling, cuyas rutas podrían prohibirse a partir del 29 de marzo, defiende que cumplirá las exigencias de la UE y seguirá volando

El "Brexit" deja entre dudas el futuro de los ya escasos enlaces aéreos de Asturias

El "Brexit" está generando una enorme incertidumbre en el sector de la aviación comercial y amenaza con desatar un auténtico caos que dejaría a Asturias y al resto de España sin sus principales conexiones aéreas. Si Theresa May no logra que la Cámara de los Comunes apruebe el acuerdo de retirada y se aplica un "Brexit" duro, las aerolíneas del grupo IAG -Iberia, su filial Iberia Express y Vueling- no podrán volar a partir del 29 de marzo entre ciudades españolas, ni hacia otros aeropuertos europeos. Asturias perdería así ocho rutas y cinco destinos, entre ellos los dos que mueven más pasajeros, Madrid y Barcelona. Y como Asturias, el resto de los aeropuertos españoles y europeos. Fuentes del grupo IAG señalaron que no están preocupados y que confían en cumplir la normativa comunitaria.

Iberia y Vueling no podrían volar en la Unión Europea (UE) porque los planes de contingencia comunitarios para el "Brexit" duro establecen que a partir del 29 de marzo sólo podrán volar entre aeropuertos europeos aquellas compañías cuyo accionariado procedente de la Comunidad Europea controle, al menos, en un 51 por ciento del capital. Y el grupo IAG, al que pertenecen Iberia, Iberia Express y Vueling incumple esa exigencia.

Las consecuencias para Asturias serían catastróficas, pues perdería las rutas a Madrid, Barcelona, Lanzarote, Tenerife y Gran Canaria, así como los vuelos de estas aerolíneas a Málaga, Mallorca y Sevilla, que también operan otras compañías. También quedaría en el aire la posibilidad de que haya en el futuro vuelos a Londres, París y Fráncfort, pues aunque el Gobierno del Principado ha sacado a concurso convenios de promoción para incentivarlos, las compañías del grupo IAG son las máximas favoritas para operarlos.

Las compañías ya están tomando medidas para afrontar las consecuencias de un "Brexit" duro y confían en cumplir el 30 de marzo las exigencias de control y propiedad de la UE. El Grupo IAG ha reaccionado lanzando un mensaje optimista: "No estamos preocupados acerca de este anuncio y nos complace que la Unión Europea haya ratificado que los vuelos continuarán". En relación al asunto del control y la propiedad, la respuesta de IAG es contundente: "Tenemos la convicción de que cumpliremos con la normativa aplicable sobre propiedad y control, tanto en el Reino Unido como en la Unión Europea, después del Brexit".

Su argumento es que IAG es "una compañía española", pues su sede social está en Madrid y las aerolíneas del grupo tienen "certificados de operación establecidos desde el inicio de sus operaciones y apoyados por sólidos negocios en España, Irlanda, Francia, Austria y el Reino Unido". En conjunto, IAG brinda empleo a 63.000 personas y operan una flota de 546 aviones.

La posibilidad de que Iberia y Vueling dejen de operar en Europa provoca honda preocupación en los sectores afectados. Íñigo Fernández, presidente de Operadores Turísticos y Agencias de Viaje de Asturias (OTAVA), espera que la compañía Iberia, el Grupo IAG, los gobiernos de Reino Unido, la UE, "y en menor medida, pero muy implicados, España e Irlanda, encuentren vías de solución, a este posible problema, si llega a producirse un 'Brexit' duro, lo cual sería malo para todos los ciudadanos europeos".

Añadió que el grupo IAG, siempre ha manifestado que Iberia, con domicilio en Madrid, "sigue siendo española" y "por ello cotiza en la bolsa madrileña". Pero "el riesgo de incomunicación, tanto para Asturias como para España, es tan impensable que no nos atrevemos ni a imaginar las consecuencias para turistas y empresarios", alertó Íñigo Fernández.

Compartir el artículo

stats