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La megaoposición se adapta a aspirantes con sofocos, epilepsia e hipoglucemia

El examen de administrativo, con 20.704 personas inscritas, incluye una versión test con tipografía más grande o en negrita

La megaoposición se adapta a aspirantes con sofocos, epilepsia e hipoglucemia

La macroposición de auxiliares administrativos que se celebrará mañana en el recinto ferial Luis Adaro de Gijón saldó ayer su último balance oficial con un total de 20.704 aspirantes aceptados. Se mantiene, no obstante, la misma estimación de afluencia de las últimas semanas: se calcula que de todos ellos sólo unos 13.000 se animarán finalmente a hacer el examen. Están en juego 232 plazas públicas.

En los últimos días el Principado ha garantizado también adaptar las instalaciones para un total de 69 usuarios que pidieron, por ejemplo, poder acceder al aula en su silla de ruedas, tener una versión de la prueba con tipografía más grande o en negrita y alargar las dos horas fijadas para cumplimentar su test. Se adoptarán, además, medidas cautelares para un usuario en riesgo de sufrir un ataque de epilepsia, otro que podría tener un golpe de hipoglucemia y un tercero que sufre un caso de trastorno vasomotor (sofocos).

Lo que queda en el aire son dos cuestiones: evitar a los copiones y confirmar el acceso de varias decenas de aspirantes que no han podido descargar su acreditación digital. La primera, en principio, se dio por saldada hace semanas, cuando Sanidad se comprometió a ampliar la separación entre los pupitres ocupados (la oposición a celadores del pasado día 10 recibió quejas por la proximidad de los inscritos). El segundo escollo tendrá que solucionarse mañana y "sobre la marcha", según Comisiones Obreras, que explicó ayer que hay varios usuarios que no figuran en la lista final de admitidos y que, por tanto, no podrán imprimir su acreditación de acceso.

El sindicato aclara, no obstante, que la inmensa mayoría de estas incidencias son "errores de muy poca importancia", como errores ortográficos en los apellidos o números equivocados del DNI, así como retrasos en las reclamaciones tramitadas por registro electrónico por parte de algunos de los excluidos. "Creemos que el portal de registro electrónico de Gijón tarda más de lo esperado en procesar las reclamaciones", explica Alejandro González.

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