Por su entrega, cercanía y autenticidad. Por eso fue ayer reconocida la científica asturiana natural de Casiellas (parroquia de Canero, Valdés) Margarita Salas, quien falleció el pasado 7 de noviembre a los 80 años cuando ni su familia ni sus amigos lo esperaban pese a su ingreso hospitalario.
Fue Margarita Salas un referente especial para el Instituto de Enseñanza Secundaria Carmen y Severo Ochoa de Luarca, al que acudía puntual cada año, desde hace más de una década, para charlar con los estudiantes y ofrecer consejos sobre la vida y el mundo científicos en la renombrada Semana de la Ciencia. Este centro de estudios se convirtió ayer en el escenario de un homenaje institucional -el primero que se hace en Asturias tras su pérdida-, en el que estuvieron el presidente del Principado, Adrián Barbón; el consejero de Ciencia, Innovación y Universidad, Borja Sánchez; el alcalde de Valdés, Oscar Pérez; la delegada del CSIC en Asturias, Ángeles Gómez Borrego, y el director del instituto, José Ignacio Nieto.
El presidente de Principado anunció la creación de un proyecto "de atención y retención" del talento científico que llevará el nombre de la ilustre investigadora valdesana. "Estará destinado a científicos de contrastada experiencia internacional que se encuentren investigando por el mundo", dijo.
En la jornada se dio paso a un vídeo realizado por el Ayuntamiento con imágenes y declaraciones de la científica y de alguno de sus discípulos y compañeros de profesión. Fue uno de los momentos más emotivos porque se destacó, entre otras cosas, su grandeza como persona: "Quiero ser recordada por mi honestidad, por ser trabajadora". No faltó en el acto un recuerdo a su marido, Eladio Viñuela, con quien ella siempre dijo que compartió el amor por "la música, el arte, los viajes y la ciencia". Tampoco se olvidó nadie del motivo que reunió a los presentes: el cierre de la XVII Semana de la Ciencia dedicada al científico, también valdesano, que introdujo a Margarita Salas en la investigación molecular, el premio Nobel de Medicina Severo Ochoa.
Como es habitual, se hizo una ofrenda floral en su tumba y antes se entregaron los premios "Severo Ochoa" del Ayuntamiento de Valdés, que este año recayeron en Ainara Álvarez García y Lucas Manuel Fernández, los mejores expedientes académicos del centro del pasado año de los seis que se presentaron a este galardón municipal que concede 1.500 euros.
