La semana de toma de posiciones acaba dejando a PP y Vox como únicos grupos de la Junta dispuestos a enmendar totalmente el presupuesto del Principado para 2020. Sólo ellos proponen la devolución del proyecto del PSOE, sabiendo de antemano que la disposición a abstenerse de Ciudadanos y la mitad de Foro garantizaba ya la salvación parlamentaria de las cuentas independientemente de la actitud de Podemos, que sigue diciendo que no le gusta el proyecto, pero que ni presentará enmienda de totalidad ni apoyará las que se defiendan desde la derecha.
El secretario general de la formación morada, Daniel Ripa, explicó ayer lo que el Comité Ciudadano Autonómico decidió por amplia mayoría el viernes, que dejarán pasar el plazo de las enmiendas totales -que expira mañana- para dar más tiempo al PSOE para reflexionar sobre sus propuestas. Si sigue sin haber respuestas satisfactorias, ejercerán como había sido anunciado su derecho al pataleo votando en contra del dictamen al final de la tramitación parlamentaria del proyecto, el próximo lunes 30.
Podemos "definirá su voto en el dictamen presupuestario en función del resultado de las enmiendas que el PSOE asuma o no en la negociación", expuso ayer Ripa, convencido de que el tiempo de hablar continúa y de que además de tiempo "hay posibilidad de llegar a acuerdos". Su planteamiento es el mismo, piden las medidas tantas veces repetidas, que son "bastante viables" a los ojos del secretario general y que valen de 22,8 millones, "el 0,47 por ciento del Presupuesto", y devuelven la pelota. "El sí, el no o la abstención de Podemos está en manos de Adrián Barbón", dice el líder podemista al día siguiente de que el Presidente volviese a acusar a los morados de no querer pactar. Sí quieren, replica, siempre que se atiendan sus demandas sobre la gratuidad de las escuelas infantiles, los 10,2 millones para suavizar el impacto de las listas de espera de la dependencia, la reducción de matrículas universitarias, el dentista en la sanidad pública? Como prueba de una manifiesta falta de entendimiento, disonante con el clima de concordia nacional entre el PSOE y Podemos, los socialistas dicen haber hecho una contraoferta y se quejan a su vez de no haber obtenido respuesta.
Más allá del partido de tenis PSOE-Podemos, al que ayer aportó Ripa su lamento porque "no puede ser que se intente justificar un acuerdo infumable con Ciudadanos y Foro diciendo que no hay posibilidad de negociación", son estas dos formaciones las que primero han dicho que han visto en las cuentas cosas que les animan a dejarlas pasar. O más bien un grupo y la mitad de otro, porque la disposición del portavoz de Foro, Adrián Pumares, choca contra la división interna de su partido y las reticencias de su único compañero, Pedro Leal, alineado con los afines a Francisco Álvarez-Cascos y disconforme con la decisión de dejar pasar el presupuesto que adoptó el viernes la comisión directiva del partido. Ayer, Leal insinuó que puede llegar a romper la disciplina de voto. "Jamás renunciaré a defender mi ideología y el programa electoral de Foro por obligación de lealtad a mí mismo y a mis votantes", dijo.
El caso es que Ripa también quiso ayer hurgar en el interior de esos acuerdos con "partidos en descomposición" que restan protagonismo a su posición. Lamenta por un lado que Foro haya dicho que su "motivación es impedir el pacto con Podemos" y atisba por otro "cosas contradictorias" en el convenio con Ciudadanos: "Parece que el acuerdo es gratis, pero ellos plantean que han conseguido diez millones del PSOE. Le pregunto a Barbón si es cierto".
En el otro flanco, el de la oposición firme al Presupuesto y las enmiendas de totalidad, la portavoz del PP, Teresa Mallada, volvió a la carga contra los dos partidos de sus aledaños ideológicos que han optado por dejar pasar las cuentas. La diputada entiende como un "desprecio" a sus votantes la falta de respuestas del Gobierno al "único grupo que ha trasladado propuestas concretas" y extiende la crítica a Cs y Foro, "dos partidos que no saben dónde están, que se mueven por impulsos. Su actitud política deja mucho que desear y los asturianos se darán cuenta de qué partido tiene las ideas claras y cuáles apuestan por una cosa o por otra según les venga en gana".
