Tres actuaciones en carreteras prometidas por el anterior consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra, están en el aire por razones jurídicas o presupuestarias. Afectan a seis concejos que han visto quedar en suspenso obras cuyas primeras actuaciones deberían ejecutarse este año, según había prometido el anterior Gobierno. Además, todos ellos están gobernados por el PSOE. Al corredor del Navia, que afecta a los municipios de Boal, Illano, Pesoz y Grandas de Salime, se añade la variante de Cayés en Llanera y la reforma de la nueva carretera de Boo, en Aller. La consejería de Infraestructuras declinó ayer hacer comentarios.
El eje del Navia, suspendido por "inviable". Los alcaldes que esperaban la necesaria mejora de la carretera AS-12 (que une Navia y el Alto del Acebo) han mostrado su malestar por la suspensión del contrato para estudiar fórmulas de financiación de un proyecto prometido por el anterior Ejecutivo y que costaría 180 millones. El gobierno actual considera que la fórmula público-privada que planteaba Lastra es inviable jurídicamente y abocaría a un endeudamiento insostenible al Principado. Los alcaldes se han sumado a las manifestaciones vecinales y han recurrido la decisión de suspender el estudio que aprobó el gabinete de Lastra y suspendió el del actual consejero, Juan Cofiño. No descartan acudir a los tribunales si su demanda termina desoída por el Principado.
Boo, en Aller: pendiente de expropiaciones, pero sin dinero. A pesar del anuncio el pasado mes de mayo del entonces consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra, de que la obra de la nueva carretera de Boo (Aller) sería adjudicada "entre enero y febrero" de este año, la realidad es bien distinta. Los trabajos no cuentan con una partida específica dentro de los presupuestos del presente ejercicio y todo parece indicar que no comenzarán hasta 2021. El proyecto está actualmente inmerso en el proceso de expropiaciones. El actual consejero de Infraestructuras, Juan Cofiño, había asegurado en diciembre que los trabajos, presupuestados en 2,5 millones de euros, estaban pendientes de iniciar este proceso en respuesta a una pregunta del diputado del PP Álvaro Queipo en la Junta General del Principado sobre los plazos de esta obra. También el grupo municipal del PP en Aller se interesó por el futuro de esta obra preguntando al gobierno local en el Pleno allerano. Por su parte, el alcalde de Aller, Juan Carlos Iglesias, mantuvo un encuentro en noviembre con la directora general de Infraestructuras, Esther Díaz, quien les aseguró que las obras se iban a licitar, pero que antes había que realizar las correspondientes expropiaciones.
Se trata de una actuación a lo largo de 2,7 kilómetros con la ejecución de casi un kilómetro de escolleras y muros de contención. La vía, actualmente en mal estado de conservación y muy estrecha, alcanzará un ancho de 6,30 metros e incluirá aceras para mejorar el tránsito peatonal. Además, construirán en el tramo de Moreda a Boo más de veinte sistemas de contención. Principalmente, muros y escolleras. La obra es más costosa de lo que resultan otras actuaciones de estas características, ya que se encuentra en una zona con condiciones geológicas muy especiales. Aunque el presupuesto es una ganga si se compara con la actuación que estaba prevista en los fondos mineros: casi 13 millones de euros, en una obra que incluía un gran puente que conectaba Marianes con Caborana.
La obra de acceso a Boo es una esperada actuación por los vecinos de la localidad. El pueblo cuenta con algo más de 300 habitantes que tienen su primera vivienda en Boo.
"Nos han faltado al respeto", dicen los vecinos de Cayés. Otra de las inversionesprometida y que se ha caído de los presupuestos regionales fue la que debía ir destinada a la variante de Cayés (Llanera). Se trata de una infraestructura destinada a relajar el tráfico de camiones por la localidad. El consejero Fernando Lastra había prometido a los vecinos que se elaboraría el proyecto en 2020. Sin embargo, los presupuestos del Principado no incluyeron la promesa.
Según apunta el alcalde de Llanera, el socialista Gerardo Sanz, la razón para ese aplazamiento es "una cuestión de prioridades". En concreto, el regidor del concejo apunta: "Habían quedado pendientes un número de promesas del gobierno regional anterior, a las que no se pudo atender en este presupuesto". Así se lo transmitió el Ejecutivo regional, asegura. Entretanto, para tratar de paliar el problema de los vecinos, pagará un estudio que determinará la posibilidad de limitar el tráfico a vehículos pesados.
Los vecinos, por su parte, se sienten "engañados". Lo cuenta Luis Álvarez, presidente de la asociación vecinal. Él, como el resto de los que viven en Cayés, están desencantados con la política, a la vista de las actitudes respecto a este asunto. "Entendemos que el gobierno regional nos ha faltado al respeto", espeta.
Consideran que, por el momento, el estudio que puede llevar a la limitación del tráfico a determinado tipo de vehículos por ese tramo de la AS-17, sería una buena medida. Eso sí, "entendiendo que la variante es necesaria e inevitable". Ya que, aunque si solo se limita el tráfico de camiones, "estos se irían a otros viales donde también causarían problemas".
Los vecinos esperan que el presupuesto de 2021, incluya este proyecto. "Nos hemos reunido con la directora de infraestructuras y sabe que es necesario. Entendemos que se incluirá en el presupuesto de 2021, que empezarán a elaborar en septiembre, según nos han dicho", concluye Álvarez.
