Se ven abocados a enfrentarse a un auténtico "sudoku" para elegir el hospital de España en el que van a realizar la especialidad. ¿Cómo? Elaborando una larguísima lista de preferencias -hasta un millar, les aconseja algún experto-, muchas de las cuales se irán cayendo con el paso de los días al ser elegidas por otros candidatos, para al final quedarse con una.
Los médicos MIR y el resto de los graduados sanitarios de toda España que están a la espera de seleccionar destino -en total, más de 23.000- rechazan de forma mayoritaria el procedimiento telemático al que van a ser convocados para formalizar una elección que consideran trascendental para su carrera. Salvo excepciones, este trámite siempre había sido presencial, en la sede del Ministerio de Sanidad, en Madrid. Sin embargo, la crisis del covid-19 ha llevado a las autoridades sanitarias a descartar que en este edificio se congreguen cientos de personas durante varios días consecutivos.
Como alternativa, la Dirección General de Ordenación Profesional ha decidido que el proceso se lleve a cabo de forma electrónica. Este sistema es, a juicio de muchos opositores, "injusto", "poco transparente" y sitúa a los graduados sanitarios de la presente promoción "en inferioridad de condiciones" con respecto a sus compañeros de convocatorias anteriores. Por eso reclaman otras posibilidades, y plantean como opción que el trámite pueda llevarse a cabo en las delegaciones del Gobierno, incluso con cita previa, si se considera conveniente.
Sin embargo, la posición del Ministerio es inamovible. La adjudicación electrónica de plazas es "igual y equitativa para todos los candidatos", declararon ayer a LA NUEVA ESPAÑA fuentes del Ministerio de Sanidad, según las cuales el citado procedimiento "garantiza la seguridad jurídica y la previsibilidad de todos los actos del Ministerio con el fin de no causar indefensión o incertidumbre a los aspirantes".
Aun no ha sido desvelada por el Ministerio la fecha en la que se iniciará la elección de plazas. Algunos rumores apuntan a mediados de junio. En años anteriores solía ser a finales de marzo o principios de abril. A este proceso están convocados los más de 23.000 aspirantes que pasaron el punto de corte en el examen realizado el pasado 25 de enero. De ellos, 2.871 son de nacionalidad no española. El colectivo más numeroso y conocido es el de los futuros médicos internos residentes (MIR), pero el contingente de opositores también está integrado por titulados universitarios en Medicina (MIR), Farmacia (FIR), Enfermería (EIR) y de los ámbitos de Psicología, Química, Biología y Física. El total de plazas de formación especializada que se adjudicarán son 9.680, de ellas 243 en Asturias.
"Resulta que vamos a tener elecciones en el País Vasco y en Galicia, que se va a poder ir a las playas, que se va a hacer el examen de la EBAU presencial, pero nosotros no podemos ir de forma ordenada a un edificio a elegir una plaza que condiciona nuestro futuro, y se nos obliga a emplear un sistema que nos plantea muchas inseguridades", argumentan algunos opositores.
El acceso al trámite de solicitar plaza se realizará a través de la sede electrónica del Ministerio de Sanidad. Solo se podrá presentar una solicitud por persona que recogerá, por orden de preferencia, todas las plazas a las que desee optar, y no se podrá optar a las plazas no recogidas en la solicitud. Borja Ruiz Mateos, responsable de la academia de formación AMIR, aconseja a sus alumnos elaborar una relación de unas 1.000 plazas, con esta distribución: 250 de muy difícil acceso por el número obtenido, 500 que sean asequibles en condiciones normales y las 250 restantes para situaciones de catástrofe, en las que inesperadamente los aspirantes anteriores ya han elegido todo lo que a uno le gustaba. Lógicamente, los que puedan elegir antes -por tener un mejor número- estarán obligados a realizar esfuerzos mucho menores.
Una vez presentada, la solicitud podrá modificarse hasta doce horas antes del inicio de la sesión en la que la persona haya sido citada para elegir. Según Borja Ruiz Mateos, lo más previsible es que la tramitación se efectúe por las mañanas, periodo en el que cada día elegirían plaza unos 400 candidatos. De este modo, lo que van detrás tendrían toda la tarde para estudiar la situación resultante y modificar su hoja de peticiones.
Los opositores serán convocados por orden de mayor a menor puntuación en la relación definitiva de resultados.
