Tras un año en blanco, obligado por la pandemia, la Feria Internacional de Muestras de Asturias (FIDMA) vuelve a abrir hoy sus puertas al público, como “un buen punto de inflexión para la recuperación de Asturias y de España”, destacó ayer en la inauguración del evento la Ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant. La idea de la recuperación económica y que la Feria es uno de sus factores de impulso planeó durante todo el acto, tanto en las palabras de quienes pronunciaron los discursos en el estrado como en los comentarios de empresarios y directivos que asistieron al acto. La seguridad de la visita al recinto y el cambio de paradigma económico también estuvieron sobre el tapete.
La cancelación del evento el año pasado no fue sólo un mazazo para la Cámara de Comercio, sino también para un buen número de empresas cuyas ventas durante todo el año dependen en gran medida de los contactos que establecen con clientes durante los 16 días de Feria, además de las operaciones que sellan durante el certamen.
El avance en la vacunación y las medidas de prevención adoptadas para esta edición han hecho posible el resurgir de la gran feria de agosto, sin la que el verano gijonés y asturiano quedó un tanto cojo el año pasado. La edición número 64 la declaró ayer oficialmente inaugurada el presidente regional Adrián Barbón –último en tomar la palabra– “en la esperanza de que la reanudación del inicio de Feria sea desde luego el preludio del crecimiento y de la creación de empleo”. El presidente regional explicó por qué en 2020 no y en 2021 sí es posible la Feria: por las vacunas, y para despejar dudas apuntó, respecto a la apertura al público con garantías de seguridad, que “saben que somos muy exigentes con las medidas”. La Cámara estuvo en contacto con el Principado para la elaboración de su plan de prevención.
La Feria llega este año como palanca para la recuperación, algo a lo que también contribuyó tras la última gran crisis, la de 2008. Ahora la economía se encamina hacia un modelo económico verde y digital. Ahí la Ministra destacó su “firme compromiso con la recuperación y la modernización de la industria y, por tanto, con la economía de Asturias”.
Precisamente, la Ministra de Ciencia e Innovación pudo mantener ayer, tras la inauguración de la Feria, un encuentro con un reducido grupo de altos cargos empresariales y de la Universidad de Oviedo en una pequeña sala del Palacio de Congresos de Gijón. En este encuentro, que se produjo a iniciativa del Ministerio, participaron directivos de Corporación Masaveu, TSK, EdP, Capsa, Asturiana de Zinc, Intermark, Hunosa y Gonvarri Hiasa, además del rector de la Universidad de Oviedo. Fue una primera toma de contacto, por espacio de unos tres cuartos de hora, en los que la Ministra se habló de los fondos europeos. Antes de su paso por Gijón, Morant ya había mantenido otro encuentro con directivos de Arcelor en Avilés.
A los fondos europeos se refirió la Ministra también en su discurso de inauguración de la Feria, destacando, entre otras cosas, que “tanto Gijón, como Oviedo y Avilés forman parte del grupo de ciudades que sin duda lo tendrán más fácil para acceder a estos fondos”, debido a que las tres forman parte de la Red Innpulso: las distinguidas por el Ministerio como Ciudades de la Ciencia y la Innovación por el apoyo a nivel local a la innovación en cada una de ellas. La Ministra también animó a aprovechar los fondos europeos para “transformar el oro negro, el carbón, en oro verde, las energías renovables y sentar unas bases sólidas para crear una nueva industria en Asturias”. Minutos antes, el presidente de la Cámara de Comercio de Gijón, Félix Baragaño, reconocía que los fondos Next Generation “es evidente que van a ser de gran ayuda, pero no la solución a los problemas de las empresas”, en un discurso en el que previamente se había referido a los costes energéticos y por emisiones que soportan las empresas, entre otros problemas.
Sobre las facilidades para el acceso a los fondos europeos la Ministra pudo departir unos minutos –antes de su encuentro a puerta cerrada con las empresas citadas– en una conversación informal con la presidenta de la patronal asturiana FADE, María Calvo, acompañada por el vicepresidente cameral, Pedro López Ferrer.
La conversación entre la presidenta de FADE y la Diana Morant tuvo lugar inmediatamente después de que finalizara la inauguración de la Feria. Como en ediciones anteriores, en la inauguración se dieron cita empresarios, sindicalistas, representantes políticos e institucionales, pero se restringieron las invitaciones a 238 personas, menos de un tercio del aforo del Salón de Actos del Palacio de Congresos, con los asistentes separados por dos asientos y las últimas filas vacías.
La recién estrenada Ministra de Ciencia y Tecnología, y hasta hace poco Alcaldesa de Gandía, tuvo ayer en la Feria su primer acto oficial fuera de Madrid. Fue recibida en el Palacio de Congresos por el presidente cameral, Félix Baragaño; el presidente de la Junta General del Principado, Marcelino Marcos; la Alcaldesa de Gijón, Ana González; la Delegada del Gobierno, Delia Losa y el Consejero de Industria, Enrique Fernández.
Llegó tras recorrer a pie varias calles del recinto ferial flanqueada por el presidente autonómico y por el vicepresidente cameral. Tuvo recibimiento con los sones diáfanos de la Banda de Gaitas Villa de Xixón, sin las distorsiones habituales de las inauguraciones previas a la pandemia, ocasionadas por el solapamiento con las gaitas de las consignas reivindicativas de los manifestantes que tradicionalmente se daban cita frente al acceso principal al recinto ferial y que este año ni fueron.
La presencia de la Ministra fue agradecida especialmente por las demás autoridades. Supone un espaldarazo al regreso de la gran cita del verano gijonés, al que se sumará la visita, el domingo, de la Ministra de Justicia, Pilar Llop.
El optimismo que inspira la reactivación de la Feria también lo expresó la alcaldesa de Gijón, Ana González, quien se refirió a esta edición como “una frontera” que marca una “linea divisoria entre el último año y medio de dolor” y el momento “de la esperanza y el optimismo”. En ese sentido, la regidora gijonesa recalcó que “esta Feria de Muestras ha de ser, por tanto, la del reencuentro, la de la esperanza, la de la recuperación de la confianza”, haciendo un llamamiento a los ciudadanos a respaldar a las empresas asturianas con el “apoyo efectivo a todo el tejido económico asturiano que regresa con sus productos y sus servicios a este recinto”.
Félix Baragaño lo resumió: “la Feria vuelve a convertirse en el motor de la economía de Asturias”, entrando en una nueva fase, la de mirar al futuro “con optimismo”.
Tras las autoridades, hoy llega el turno para la ciudadanía, que ya puede visitar la Feria. Su horario será de 11.00 a 22.00 horas desde hoy hasta el 22 de agosto.
