Renfe ha suscrito con el fabricante Stadler Rail Valencia el contrato para el suministro de doce locomotoras de mercancías que prestarán servicio a partir de la apertura de la Variante de Pajares. La entrega del nuevo material, que se fabricará íntegramente en la planta de Stadler en Albuixech (Valencia), está programada para el segundo semestre del próximo año, supuestamente a tiempo para que arrastren los convoyes mercantes que utilizarán los tubos bajo la Cordillera en el momento de su puesta en marcha. Las máquinas del encargo, firmado por el presidente de Renfe, Isaías Táboas, y el de la empresa constructora, Íñigo Parra, son dispositivos multisistema Euro6000, tritensión, de seis ejes, aptas para vías de ancho ibérico y para la catenaria de los túneles.
Las máquinas propulsoras recién encargadas por Renfe Mercancías tienen una capacidad de tracción de 1.800 toneladas en rampas de dieciocho milésimas y se les supone una potencia y unas prestaciones idóneas para los principales clientes de Renfe el trayecto de Pajares, sobre todo los del mercado siderúrgico. La operación de compra, con la que el operador ferroviario opta por un material con mayor capacidad de carga y mejores niveles de fiabilidad, responde al interés de Renfe por incrementar su actividad y su cuota en el transporte de mercancías. La capacidad de absorción de tráficos que Asturias sea capaz de desarrollar a partir de la puesta en marcha de la Variante tiene mucho que decir en la competitividad económica de la región. Ha sido ésta una de las razones por las que se ha defendido que el ancho de vía instalado en los túneles permita el paso de los trenes de carga, para los que no hay solución técnica en raíles de ancho AVE –de 1.435 milímetros–. Renfe, no obstante, tiene entre sus objetivos garantizar que todas las locomotoras del suministro puedan estar dotadas de un sistema de cambio de ejes.
