La presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, está dispuesta a que en las aulas de su comunidad los alumnos conozcan bien, a través de los planes de estudio, quién fue el rey astur don Pelayo y la dimensión de su hazaña: “La Reconquista no se parece a nada que haya ocurrido en ninguna otra nación del mundo. Durante casi ocho siglos, España luchó por seguir siendo europea, occidental y libre. ¿Qué otra nación del mundo ha sido sometida en un proceso semejante de conquista e islamización y se puede llamar hoy “Occidente”? Esta unicidad de España tuvo unas consecuencias que alimentaron las raíces más profundas del ser hispánico, que nos permitió dar al mundo algunos de los mejores frutos de la historia”.
Así lo señaló la dirigente madrileña al recibir la medalla conmemorativa de los 1.300 años de la batalla de Covadonga y un diploma acreditativo.
Se los entregó en la capital de España el presidente del Real Cuerpo de la Nobleza del Principado de Asturias, Francisco de Borbón y Escasany, duque de Sevilla. Alfredo Leonard, consejero de Relaciones Institucionales del Cuerpo, señaló que con la distinción se quiere dejar constancia “de los sentimientos de afecto y amistad” del cuerpo hacia los presentes.
Díaz Ayuso se mostró encantada con el reconocimiento, tal y como ha explicado a LA NUEVA ESPAÑA el canciller del Cuerpo de Nobles de Asturias, Manuel Ruiz de Bucesta. “La verdad es que es una persona muy amable y está muy agradecida”.
Un agradecimiento que la presidenta madrileña transmitió en su discurso: “La entrega de esta medalla es un honor y una responsabilidad. Y la ejercerá mi Gobierno aplicando todas las mejoras necesarias, dentro de sus competencias, para contrarrestar en lo posible el daño causado por la postergación de la Historia de España, y los mismos conceptos de España y la Hispanidad, en los planes de estudio del Gobierno de Sánchez. Para que los jóvenes que estudien en la Comunidad de Madrid sí puedan saber quiénes son”.
Porque opina Ayuso que la “Reconquista no debería ser un término cualquiera para un español, pero tampoco para ningún europeo”, porque después de ella llegaron grandes acontecimientos en la historia de España y de toda Europa (el Camino de Santiago, el diseño de la diplomacia moderna, el derecho, la Hispanidad...) “que no podrían haber ocurrido sin la hazaña de don Pelayo”.
