La integración de la antigua Feve en Renfe va camino de nueve años y medio sin que nadie haya encontrado un hueco para acometer la unificación de las tarifas de las dos operadoras. El Gobierno del Principado se propone ahora “urgir” al Ejecutivo estatal, a través del Ministerio de Hacienda, para que autorice al fin la operación e incluso pone fecha fija para la resolución de la viejísima asignatura pendiente. El objetivo, según el anuncio que hizo ayer el consejero de Medio Rural y Cohesión Territorial, Alejandro Calvo, está puesto en septiembre, el momento en el que el Principado espera que Madrid “culmine los compromisos adquiridos con el Consorcio de Transportes de Asturias (CTA)” para que “todas las estaciones, los trenes y la tecnología necesaria pueda funcionar con la nueva plataforma de movilidad en la que se convertirá de forma progresiva el CTA a partir de este verano”. “Estos plazos para nosotros son imprescindibles”, remarcó.
Calvo respondía en la Junta una pregunta del diputado de IU Ovidio Zapico sobre los trabajos para la reorganización de la malla horaria del ferrocarril en Asturias. El Consejero tuvo que reconocer “los problemas” que está generando en la vieja Feve la implantación del sistema de ayuda a la conducción más sofisticado, el ASFA digital. Sus afecciones sobre la velocidad de los trenes han obligado a una “reprogramación de tiempos” y a una cierta paradoja, asintió, en la que la incorporación de un sistema más moderno retrasa el paso de los trenes. “Se hace difícil explicar que las mejoras de fiabilidad alarguen los tiempos”, asume Calvo, pero el asunto es que está pasando y que el Consejero al menos puede confiar tras haber generado, afirma, “mecanismos de diálogo permanente con el Ministerio para avanzar”.
En el largo recorrido, Calvo se hizo eco de los planes de Renfe de recuperar este verano el Alvia a Alicante que había quedado suspendido por la pandemia y que ahora se beneficiará de la puesta en servicio del demandado túnel de conexión entre las estaciones de Chamartín y Atocha, en Madrid. El Consejero también anunció una inversión de cuarenta millones de euros en “la renovación del material para mejorar el confort de los trenes”, pero no pudo dar esperanzas del retorno del servicio a Barcelona: “No está en los planes del operador su recuperación a corto plazo”.
Si todo depende de la progresiva recuperación de la demanda, Calvo festejó el fuerte incremento de la respuesta de los viajeros de la ruta Asturias-Madrid, con “86.713 subidos y bajados desde principios de 2022”, una cifra que duplica la del año pasado pero aún sigue un 33 por ciento por debajo de las de antes de la pandemia.
Cuestionado también por el portavoz de Foro, Adrián Pumares, acerca de las posibilidades que da a la conexión con Asturias del recién anunciado “miniave” del Cantábrico entre Santander y Bilbao, el Consejero respondió que “para las comunidades autónomas que no tienen AVE ni lo tendrán debe ser una alternativa, pero estamos hablando de una planificación a medio plazo. Cuando eso llegue, lo lógico será que se tenga continuidad hacia Asturias, pero a medio o largo plazo”, reseñó.
