Saúl FERNÁNDEZ

La situación encrespada en el Ayuntamiento está llegando a desbordar el vaso de la paciencia de los representantes sindicales. Ángel Fernández García (UGT), presidente del comité de empresa, y Manuel Jesús Villa (SIPLA), presidente de la Junta de Personal, anunciaron movilizaciones -«paros», dijeron- si el Ayuntamiento no retoma las negociaciones del nuevo convenio colectivo de los trabajadores públicos. El último está agotado desde 2007.

Los dos sindicalistas denunciaron, además, «la precaria situación laboral que vive el Ayuntamiento». Según los dos portavoces de los trabajadores, el Ayuntamiento de Avilés mantiene en la actualidad «un nivel de precariedad laboral de un cuarenta por ciento»; de hecho, afirmaron, «el Ayuntamiento de Avilés es la entidad pública que genera mayor precariedad laboral».

Según Manuel Jesús Villa, «no se puede predicar una cosa cuando se habla de las instituciones autonómicas o nacional y hacer otra distinta cuando lo que toca es la Administración local. Y menos si quien está hablando es un Gobierno de izquierdas».

Villa y Fernández García convinieron en que cuando se está hablando de «la gestión de personal en el Ayuntamiento» lo que se hace es hablar de «una de las empresas más importantes de la comarca». El comité de empresa representa a unos quinientos trabajadores laborales mientras que la Junta Local es el órgano representativo de más de tres centenares de funcionarios.

Ángel Fernández García y Manuel Jesús Villa denunciaron también la falta de compromiso municipal con el personal al que emplea. «Y además se dedican a ningunear a los representantes legítimos de los trabajadores», comentó Fernández García. Recordó que la política de personal llevada a cabo por los distintos gobiernos locales no ha sido la mejor de las posibles: «Pasamos de tener un concejal de Personal liberado acompañado de un director especializado a tener a un concejal sin dedicación exclusiva y un director general. Es decir, un director de todo, que al final tiene que ocuparse de todas las cosas», explicó Fernández. «En estos últimos años no se ha gestionado el personal: antes por incompetencia y ahora por inapetencia», certificó el representante de UGT.

Villa y Fernández García atacaron a los responsables de gestionar el trabajo de los empleados públicos. «Sólo se reúnen con nosotros para informar de sus decisiones, que luego pasan y aprueban en los plenos, sin que la oposición se entere de nada», explicó Villa. Como ejemplo, se refirieron a una reunión a la que han sido convocados esta mañana: «Nos dirán que hay una plaza amortizada y no podremos discutir, porque la decisión ha sido tomada», explicó Villa.

Denunciaron además la pérdida de poder adquisitivo por parte de los trabajadores públicos: «Un 31,2 por ciento desde 1994», dijo Villa.

Los dos representantes por todo ello instaron al gobierno a hacer algo «para que esto cambie» y amenazaron con movilizaciones si no «se modifican las cosas».