Los políticos avilesinos, se les nota, están ya en tiempo de descuento ante la próxima cita electoral. Andan metidos en sus cuentas, en sus cábalas, a ver cómo se comportará el electorado en mayo, a pesar de que ésa siempre es una incógnita que sólo se justifica a posteriori. Únicamente el PSOE ha despejado el nombre de su candidata: Pilar Varela. El PP no ha resuelto aún su dicotomía entre Constantino Álvarez y Carmen Maniega, y en IU parece que no será pacífica la designación de cartel con el partido en plena y reciente división. Los independientes de ASIA tampoco han mostrado sus cartas y Antonio Sabino le da vueltas a su futuro, aunque ya ha anticipado que eso de la política «engancha» y que «algo habrá que hacer». Por tanto, que se alce el telón y comience el espectáculo. Con casi todo el pescado vendido, a cada cual sólo le queda encomendarse a su estampita favorita para que las tendencias, las encuestas, las impresiones, les sean favorables. Como dice el dicho estudiantil, que Dios reparta suerte, porque si reparte justicia...
