El Monumento Natural de la Isla de La Deva y el Playón de Bayas es uno de los espacios costeros más importantes de Asturias. Las playas de El Sablón y Los Requexinos, junto a la Isla de La Deva, la rasa de El Planu, las puntas de Vidrias y El Socollu, y los pedreros de La Barca, Malabaxada y El Regueru, forman este espacio protegido.

El Sablón de Bayas, tiene un alto valor ecológico y didáctico, que lo convierte en un lugar adecuado para la iniciación y conocimiento de los elementos geomorfológicos y biológicos asociados a la costa asturiana. Aquí encontramos un complejo sistema dunar en un estado de conservación bastante bueno, que alberga un buen número de especies vegetales muy escasas en el resto de la costa asturiana. Es justamente ese complejo dunar lo que le confiere a la playa un estatus único en Asturias, que necesitaría de una figura legal de mayor protección.

Tiene una primera franja dunar donde se encuentran las especies más interesantes e importantes, sobre todo por su rareza, como es el caso de la Lechetrezna de playa. Por detrás hay una segunda zona dunar donde el número de especies aumenta, destacando el Barrón; sus raíces sirven para asentar la duna, permitiendo de esta manera la colonización de las dunas por otras plantas, de las cuales destacan por su importancia botánica la Mielga marina y la Lechuguilla dulce. Finalmente, hay una tercera franja dunar, donde encontramos las plantas leñosas, pequeños bosquetes de pinos y eucaliptos.

Mucha gente conoce esta playa por la gran cantidad de madera y basura que acumula, debido a que es la primera playa ubicada después de la desembocadura del Nalón. Por lo tanto, sirve como termómetro de la sensibilidad ecológica de los vecinos de ese río. Actualmente la mayor amenaza que tiene este entorno natural es el grave deterioro de las dunas, sobre todo las de la primera franja dunar, que año tras año sufren un serio retroceso, el cual comenzó con los dragados intensivos para darle calado al puerto carbonero de San Esteban (se hicieron hasta el año 1977). Otra seria amenaza es el acceso de vehículos a las zonas dunares, causando graves deterioros en las mismas, por lo que se tendría que prohibir su acceso, dejando la pista que se introduce en ellas y que llega a la zona de Requexinos, para uso de socorrismo y emergencias en la época de baño.