Arcelor-Mittal y el Principado aportarán cuarenta millones de euros a partes iguales hasta 2019 para potenciar la capacidad investigadora del Centro de I+D Global de la multinacional en Asturias, con sede en Avilés. La siderúrgica, que desarrolla en este centro tecnológico proyectos vinculados a los procesos industriales, ampliará sus áreas de investigación y contratará al menos a treinta jóvenes en prácticas cada año. "Seguiremos dinamizando el tejido industrial asturiano a través de más colaboraciones con empresas y con organismos regionales vinculados al conocimiento", aseveró en Avilés el máximo responsable de I+D de Arcelor-Mittal, Gregory Ludkovsky.
Ludkovsky suscribió ayer con el presidente del Principado, Javier Fernández, un acuerdo de colaboración a cinco años destinado a impulsar acciones de investigación e innovación que favorezcan la actividad económica de la región, la generación de empleo y el aprovechamiento del talento de los jóvenes titulados de centros de formación y de la Universidad de Oviedo. El acto se desarrolló en el moderno edificio que impulsó la Fundación Metal en el Parque Empresarial Principado de Asturias, y que ocupará en régimen de alquiler la multinacional para expandir la actividad del centro tecnológico de la Avenida de Gijón, donde trabajan en la actualidad un centenar de personas.
El director general de Arcelor-Mittal en España, José Enrique de la Rubiera, señaló que "el 90 por ciento de los aceros que ahora comercializamos no se fabricaban hace 20 años" y que "apostar por la investigación, el desarrollo y la innovación no es un lujo, es una necesidad". Destacó que "para seguir siendo competitivos en el futuro" resulta fundamental "ofrecer soluciones innovadoras y eficientes", cuestión a la que también se refirió el máximo responsable de I+D del grupo siderúrgico. "Visito a menudo China -he estado en Shangai hace unos días- y siempre me pregunto cómo vamos a competir con ellos y triunfar. En un mundo dominado por la productividad sólo se puede triunfar con la innovación y también con un poco de creatividad", aseveró Gregory Ludkovsky.
Ludkovsky recordó su primera visita a Asturias, hace seis años, cuando descubrió el equipo de I+D avilesino. "Durante los últimos años he visto cómo aquel pequeño equipo, que surgió prácticamente desde la nada, se transformó en un pilar esencial de nuestra organización de I+D y en un apoyo para el desarrollo de Arcelor-Mittal en materia de innovación que se ha convertido en una referencia mundial por su reconocida experiencia", reconoció. La red de I+D de Arcelor está integrada por once centros repartidos entre Europa y América, si bien el de Asturias es uno de los cuatro dedicados al desarrollo y mejora de los procesos industriales siderúrgicos (los otros tres se encuentran en Estados Unidos, Canadá y Francia). Desde el centro tecnológico avilesino de la multinacional se lideran soluciones de mejora para las factorías del grupo Arcelor-Mittal en todo el mundo.
¿Y dónde está el éxito del Centro de I+D Global? Según Ludkovsky, se debe "a las personas que lo componen, a las entidades con las que colabora, a la cercanía a la planta productora, a la Universidad, a la red de centros de investigación y a empresas relacionadas con la tecnología", una combinación de elementos que "ha convertido a Asturias en una región fundamental para el futuro de la organización de I+D de Arcelor-Mittal".
A través del acuerdo suscrito ayer, tanto la administración autonómica como la compañía se comprometen a que las acciones a desarrollar tengan un efecto dinamizador sobre las pequeñas y medianas empresas (pymes) con la consolidación de inversiones en I+D+i (investigación, desarrollo e innovación). El convenio también contempla la ejecución de proyectos en colaboración con centros tecnológicos, la Universidad y grupos de investigación especialistas en áreas de interés. En concreto, se impulsarán las siguientes áreas: investigación, desarrollo y adecuación de tecnologías energéticas, medioambientales y productivas para su integración el sector siderometalúrgico; investigación e implementación de soluciones para la mejora de la productividad y calidad de los procesos existentes; soluciones innovadoras para la integración de la cadena de suministro, incluida la integración y optimización con los clientes de las plantas siderometalúrgicas, y el desarrollo de nuevas tecnologías para la manufactura de nuevos productos de alto valor añadido.
El presidente autonómico ligó el acuerdo suscrito ayer a la estrategia de especialización inteligente aprobada esta semana que guiará las políticas de I+D+i y de desarrollo tecnológico hasta 2020 con financiación de la Unión Europea. "Una de las líneas de trabajo estará precisamente relacionada con la producción y la transformación del acero y se completará con la industria auxiliar del naval y del off-shore (instalaciones industriales en el mar). El convenio firmado hoy -por ayer- forma parte de la estrategia anunciada ya en septiembre que, apoyada por el Gobierno del Principado, las grandes empresas y la Universidad, impulsará la investigación y la innovación", apuntó Javier Fernández.
Pacto energético
El dirigente regional destacó que "la industria debe seguir siendo el corazón económico de Asturias" y como viene siendo habitual en sus últimas comparecencias públicas, urgió "un pacto de Estado por la electricidad que evite que los costes de la energía se conviertan en un elemento disuasorio para la actividad empresarial".
"Como presidente del Gobierno de Asturias, me comprometo a insistir en este planteamiento. España no puede conformarse con ser un destino turístico, necesita una musculatura productiva de la que ahora mismo carece", subrayó. Fernández advirtió que "Asturias es una de las comunidades autónomas que se puede ver más dañada por una política energética equivocada". "Estoy seguro de que esto también preocupa a Arcelor-Mittal. Ofrezco todo el apoyo del Gobierno del Principado para favorecer un diseño energético favorable al desarrollo de la actividad industrial", señaló Javier Fernández dirigiéndose a los dirigentes de Arcelor.
