La Escolanía de Covadonga estrenó ayer en la iglesia de Santo Tomás de Cantorbery la "Misa del padre Guzmán", sacerdote benedictino que durante su estancia en el Real Sitio compuso esta obra en homenaje a la Santina. "Es una misa preciosa, de gran musicalidad, dinámica y con solos que realzan las distintas partes", apuntaba antes de ayer Jorge de la Vega Laria, director de la agrupación que acude por segundo año consecutivo a la Semana de Música Religiosa. Llegó a Avilés acompañada al órgano por Fernando Álvarez Menéndez, un grupo de instrumentistas, igualmente integrantes de la Escolanía, y antiguos miembros de la formación. En total, cincuenta y cinco personas difundieron la música en honor a la patrona de Asturias.
Las jornadas musicales que dirige José María Martínez Sánchez encaran la recta final. Mañana, domingo, el templo de la plaza de la Merced acogerá el último de los conciertos de la trigésimo octava edición de esta Semana. El organista catalán Pablo Taboada Jiménez clausurará el ciclo con un concierto que dará comienzo a las 20.00 horas y que ofrecerá un programa de gran complejidad interpretativa. El recital incluye obras de Jusepe Ximénez, Bach y Max Reger.
