Cerca de 5.000 personas han mostrado su apoyo a la plataforma que pelea por la recuperación de las marismas de Maqua, desecadas desde mediados del siglo pasado. El colectivo presentó ayer por registro las rúbricas recabadas en el último mes a través de la plataforma de peticiones Change.org y la respuesta municipal ha sido casi inmediata. Apenas tres horas después, el gobierno local anunció que impulsará la modificación del Plan General para garantizar la protección de las Marismas de Maqua. Quienes demandan la recuperación ambiental de estos terrenos se mostraron cautelosos tras el anuncio: "De momento suena a electoralismo, pero si lo que dicen ahora se plasma en realidad bienvenido sea. Rectificar es de sabios", señaló David Díaz, de Mavea, colectivo que impulsó la iniciativa y uno de los 24 grupos que conforman la plataforma.

Las marismas de Llodero y las Aceñas, popularmente conocidas como marismas de Maqua, comenzaron a desecarse hace más de cien años con una concesión para usos agrícolas otorgada por real orden a la Marquesa de San Juan de Nieva. En la década de 1980, las marismas aún no estaban totalmente desecadas, quedando pequeñas charcas. En este tiempo, según los ecologistas, no se dio ningún uso a esos terrenos salvo la instalación de la depuradora de Avilés. Ese suelo, aproximadamente diez hectáreas de terreno, es el que pretende recuperar la plataforma por la recuperación de las marismas de Maqua.

La plataforma viene pidiendo al Ayuntamiento -ahora con el aval de casi 5.000 ciudadanos- la modificación del Plan General de Ordenación, para que cambie la calificación actual de los terrenos ("zona de servicio portuario") a "zona de interés para la restauración ambiental", y también que promueva su restauración ambiental. Los integrantes de la plataforma están convencidos de que esta restauración supondría un punto de inflexión en el proceso de degradación medioambiental de la ría, que llevaría aparejado un incremento sustancial de la biodiversidad y que este espacio podría convertirse en "un aula al aire libre donde los vecinos podrían descubrir y disfrutar de la riqueza natural". Y además, unas Marismas de Maqua restauradas supondrían también "un nuevo e importante elemento de dinamización turística para la comarca".

Así parece entenderlo también ahora el gobierno local, que acepta que los terrenos pasen a ser calificados como zona de interés para restauración ambiental. El concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, Teófilo Rodríguez, explicó que esta modificación es posible "toda vez que ha quedado sin efecto el convenio de la Autoridad Portuaria, el Ayuntamiento y (las empresas) Tadarsa e Idesa, que preveía que este espacio tuviese uso industrial; y una vez también que el Puerto ha consolidado sus instalaciones en la margen derecha tras la ampliación llevada a cabo".

En la plataforma sostienen que ese convenio al que se refiere el concejal de Urbanismo "lleva dos años rescindido". "Por eso nos suena a electoralismo, porque esto hace tiempo que se pudo haber solucionado. Si realmente el gobierno tiene voluntad, está a tiempo de demostrarlo llevando la modificación del Plan General a Pleno antes de que finalice este mandato. Si les da tiempo a cambiarlo para que Azsa pueda aumentar la zona de almacenamiento de jarofix en El Estrellín, también les tendría que dar tiempo a esto", señaló David Díaz. En la plataforma aseguran que "Foro e IU han demostrado que están a favor" de su planteamiento, al que se suma ahora el PSOE. "El espacio integrado por la Ensenada de Llodero, la Charca de Zeluán, el paseo y el pueblo de San Juan, el faro y estas marismas constituyen un espacio natural muy importante desde el punto de vista medioambiental y paisajístico", aseveró Rodríguez.