El barrio marinero de Sabugo y el de Miranda dieron comienzo a sus fiestas con sendos pregones. El de Sabugo, a cargo del profesor Julio López Peláez por la festividad de Santa Ana, hizo rememorar la historia del barrio y, a pesar de la lluvia, los vecinos de sus calles y demás personas no quisieron perderse la lectura. El geólogo y profesor del colegio San Fernando de Avilés también señaló el cambio "profundo" que ha experimentado la zona a lo largo de los años. Para Julio López, el Sabugo contemporáneo es "diferente pero integrado, agradable y de entorno bullicioso como antaño" . Además, remarcó su esperanza de que las fiestas sean de "diversión y alegría para los vecinos, dejando a un lado resquemores, rencillas y malos pensamientos porque es un deber disfrutar de la festividad de Santa Ana".

Los vecinos de Sabugo, algunos ataviados con las vestimentas marineras tradicionales -el pañuelo azul y blanco, camisa blanca y pantalón o falda azul- revivieron su pasado con las referencias históricas del pregonero, nacido en el barrio que, desde el pequeño escenario levantado en la plaza el Carbayo, destacó la construcción del barrio avilesino desde principio del siglo XIX.

Posteriormente, la agrupación "Xaréu d'Ochobre" animó a los asistentes a bailar y, a continuación, se entregó a los socios de Santanina una botella conmemorativa. La fiesta siguió con el habitual baile vermut, amenizado por el "Dúo Difussión". Por la tarde hubo juegos infantiles, que hicieron las delicias de los más pequeños. La tarde y la noche fue de los más musical. Primero con el grupo "Mestura", y ya cercana la medianoche, con "La Movida" en la Plaza el Carbayo y "Guateque Proyect" en La Monstrua. Para hoy, misa a mediodía y más actividades a lo largo de la jornada.

Por otra parte, Xosé Ambás fue el encargado de dar el pregón que inició las fiestas de la Sacramental y las de Santo Domingo de Guzmán en Miranda. Ambás recordó la historia de Miranda a través de su propia juventud y de sus "llargos viaxes pa un rapacín que d´aquella que salía pocu d´Ambás y Grau yeren mui interesantes".

En el pregón, Ambás, que echó unos cantares, se acordó de los problemas que actualmente tiene la región y destacó que "ye una suerte poder disfrutar apreciando lo propio, lo de casa, la cultura d´unu pero cuanto se sufre, cuanto duel ver l´abandonu, el destrozu, l´apatía, el desconocimientu y mal facer de la clase política".