La mala calidad del aire de Avilés obliga a decretar la prealerta por contaminación

En declaraciones remitidas a los medios, la directora general de Prevención y Control Ambiental, Elena Marañón, ha explicado que se ha activado en la zona de Avilés y Salinas como consecuencia de "desniveles elevados" de partículas durante el fin de semana. Con tres días consecutivos de exceso de partículas, el plan de calidad del aire contempla acatar medidas de control sobre las emisiones industriales, también en el entorno portuario y en el tráfico rodado. Sobre este último aspecto, ha informado de que, tanto por la mañana como por la tarde, se procederá al baldeo de las carreteras de titularidad municipal, autonómica y estatal de la zona de Avilés y Castrillón.

Asimismo, se ha convocado una comisión para este miércoles para valorar si se sigue con las medidas en función de las previsiones meteorológicas.

Las principales superaciones de los niveles de contaminación se han detectado en las estaciones de Llano Ponte, la plaza de la Guitarra y Salinas, con valores de media diaria de partículas mayores de diez micras (PM 10) que oscilaron entre 52 y 60 microgramos/m3 (el valor límite es de 50). También se registraron valores altos en las partículas de menor tamaño, PM 2,5, que se miden en la estación de Salinas, con medias diarias de 36 y 37 microgramos/m3 el sábado 29 y el domingo 30, respectivamente (el valor límite diario es de 25). En la estación de Las Arobias, aunque se produjo algún pico de contaminación, no se superaron los límites durante el fin de semana.

La Consejería de Medio Ambiente había advertido el lunes por la tarde de la posible declaración del nivel de prealerta si la situación no remitía durante la madrugada y las primeras horas de hoy. Según la autoridad ambiental asturiana, "la situación de estabilidad atmosférica provocó durante el fin de semana superaciones del valor límite diario de partículas en suspensión en algunas de las estaciones de la red". Es por eso que Medio Ambiente anunció que en el caso de persistir la situación, y en función de los pronósticos de la Agencia de Meteorología, podría decretar el nivel de prealerta ambiental, cuyas consecuencias son la adopción de normas restrictivas de las actividades potencialmente contaminantes.

La Consejería explicó en un comunicado que las condiciones meteorológicas de las últimas horas han tenido influencia en los "picos" de contaminación: "En situaciones normales el aire se mueve constantemente, tanto en sentido horizontal, por la acción del viento, como en sentido vertical, por el gradiente térmico (diferencia de temperatura entre las capas de aire). Habitualmente, la temperatura del aire disminuye con la altura, las capas más calientes están en la parte inferior, lo que facilita el movimiento vertical ascendente. Debido a distintos fenómenos meteorológicos, puede modificarse el gradiente térmico, llegando incluso a invertirse; es decir, que aumenta la temperatura con la altura, lo que impide la dispersión vertical de los contaminantes, muy especialmente cuando se produce la inversión en las capas más bajas de la atmósfera. Esto ocurre con mayor frecuencia en otoño e invierno, cuando se mantienen situaciones anticiclónicas durante varios días".

A esta situación de estabilidad atmosférica se ha sumado otro fenómeno natural que también contribuye a este incremento: las intrusiones de polvo sahariano. Los modelos de predicción pronosticaron la presencia de intrusiones del 26 al 30 de octubre, pero no existe una coincidencia en los previsiones actuales, ya que algunos modelos anunciaron su retirada y otros, su persistencia.