Pedro Pascual Criado cumplió ayer su deseo: juntar en una fiesta de cumpleaños a sus familiares y a amigos del barrio de La Luz, donde reside, para brindar por sus cien años de vida. Nacido en Cuéllar (Segovia) y criado en Valladolid, donde siendo un niño comenzó a trabajar en el campo, a los 32 contrajo matrimonio con la leonesa Gertrudis Pérez; el matrimonio, como tantos otros, se trasladó a Avilés en busca de un porvenir en la floreciente Ensidesa. Para entonces tenían dos hijos: Sari y Marcelino. Después vinieron José Luis, Francisco Manuel y Eusebia. Ayer fue un día muy especial en el que éstos y otros recuerdos afloraron de forma emotiva en la cabeza del centenario.

Pedro Pascual, jubilado de la siderúrgica, organizó una fiesta a la que se acudía por expresa invitación del homenajeado y costeó el cubierto de los comensales. "Para cuando cumpla 101 años, ya no pago", dejó dicho. Bienhumorado, como de costumbre, el "güelo" de La Luz derrochó ayer energía para celebrar un siglo de vida.