La pequeña Claudia Sánchez recibió ayer el homenaje póstumo de su club, el Villa de Luanco, donde jugaba al baloncesto. Una enfermedad se la llevó en diciembre y sus compañeras quieren mantener su recuerdo. El club adoptó la decisión de retirar el dorsal número 11, el que usaba Claudia, como homenaje a la jugadora.

La retirada del dorsal se llevó a cabo en un acto celebrado en los prolegómenos del partido que iba a enfrentar a las cadetes del Villa de Luanco con el Colegio Loyola, de Oviedo, en el polideportivo de la capital de Gozón. La camiseta con el número 11 a la espalda, única en las equipaciones del club, se vio por última vez en la mañana de ayer.

Nadie quiso perderse el homenaje a una querida amiga y compañera y las jugadoras de la sección de baloncesto del club formaron alrededor de la pista para arropar a su familia. Tania, su hermana, y Cristina Alfonso, su madre, vivieron con intensidad los instantes previos desde la banda, recibiendo el cariño del club y de las autoridades.

Ya en el centro de la pista, las compañeras de Claudia les entregaron un recuerdo antes de que el presidente del Villa de Luanco, Mariano Cimadevilla, entregase al alcalde de Gozón, Jorge Suárez, la camiseta con el dorsal 11. El regidor de Gozón quiso estar presente en la cita y fue el encargado de dar a la familia de Claudia la camiseta de homenaje. En la pista del polideportivo luanquín se vivieron momentos de mucha emoción, especialmente al encontrarse Tania y Cristina con las compañeras y amigas de Claudia.

"Estoy alucinada y agradecida porque se recuerde siempre a mi pequeña", acertaba a expresar Cristina Alfonso tras el homenaje. Un acto que reconoció que "esperaba, porque conozco a la gente del club y sé cómo son".