La compañía residente del legendario teatro Globe de Londres -una réplica del de William Shakespeare- está de gira. La empezó a finales de mayo cerca de la capital británica, en Kent, y este sábado dejó Bangor, que está en Gales. De ahí va a saltar al continente, a España: el miércoles y jueves estará en Bilbao; el sábado 16 (20.30 horas), en Avilés y la semana que viene, saltará a Madrid.
Su presencia en la península ya es noticia enorme; lo es más, sin embargo, la propuesta que trae bajo el brazo: que sean los espectadores los que elijan en las urnas qué función quieren ver en el escenario cada noche. Y es que los actores del Globe, como las viejas compañías de repertorio o los cómicos de la legua, están en disposición de representar las comedias "Noche de reyes" y "La fierecilla domada" y el drama judicial "El mercader de Venecia". Cuál será la que finalmente se represente sobre el escenario del Niemeyer será cosa del destino y de la democracia. Elegirá el público.
The Globe se encuentra a orillas del río Támesis, es una de las atracciones turísticas más exitosas de Londres. Está allí desde 1997, lo que pasa es que hunde sus raíces en la época isabelina, la de William Shakespeare. Entre finales del siglo XVI y comienzos de la siguiente centuria el escritor inglés le dio una vuelta al teatro mundial. Lo hizo con su compañía (aparte de escribir, también actuaba) y en The Globe original. La distancia del lugar original al actual es escasa: 200 metros. Los actores que trabajan ahora en el escenario lo hacen siguiendo los usos de la época clásica. Y así es como se presentarán en España. Son Luke Brady, Steffan Cennydd, Cynthia Emeagi, Sarah Finigan, Colm Gormley, Russell Layton, Rhianna McGreevy y Jacqueline Phillips. Todos ellos dirigidos por Brendan O'Hea.
Urnas y papeletas
La dirección del Niemeyer dispondrá de urnas para que cada uno de los espectadores deposite la papeleta con el título de la función que quiere ver (con sobretítulos, es decir, como cuando los actores Declan Donnellan representaron en Avilés "Cuento de invierno" el año pasado).
Dice el crítico Harold Bloom que "Noche de Reyes" es "la más grande de las comedias puras de Shakespeare". Y la de Bloom es quizás la voz más autorizada para juzgar al bardo de Stratford, que la escribió entre 1601 y 1602. Bloom sospecha que el papel de Antonio se lo reservó el propio Shakespeare. La peripecia comienza tras un naufragio.
Opina Bloom que "La fierecilla domada" es tanto "una comedia romántica como una farsa". Se centra en Catalina, en su padre Bautista y en Petrucho. Catalina no quiere novio, pero su hermana menor no se puede casar si ella no se casa antes. Ahí entra Petrucho.
Bloom ve en "El mercader de Venecia" una comedia antisemita. Otros críticos, sin embargo, observan un drama sobre la realidad de la justicia. Sale Shylock, uno de los genuinos secundarios shakespeareanos.
