Cincuenta jóvenes de entre 17 y 25 años pertenecientes a la parroquia de San Nicolás se hallan de peregrinación al santuario polaco de Czestochowa, muy vinculado al papa Juan Pablo II. El día anterior a su partida, el pasado domingo, el párroco Alfonso López ofició una misa donde se bendijo a los peregrinos en presencia de sus familiares y amigos, además de los habituales fieles que acuden a la celebración.
El grupo de jóvenes fue escogido por sus labores en actividades solidarias con las ONG Cáritas y Manos Unidas, así como por la ayuda al estudio que prestan a niños inmigrantes y las visitas que realizan a ancianos en el asilo. "Los que van al viaje han tenido que ganárselo. Además de los cincuenta que van, hay treinta que se quedaron en lista de espera", comentó el propio párroco.
La salida hacia Francia, primer destino del viaje, fue este lunes a las 22.30 horas porque, en palabras de Alfonso López, que acompaña a la comitiva, "así estaremos por la mañana en Poitiers -primera parada- y, ya de tarde, en París para oficiar una misa en la capilla de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa".
El viaje durará 16 días, hasta el 15 de agosto, en los que el grupo recorrerá un total de trece destinos, además del propio santuario polaco, todos ellos ligados a Juan Pablo II: Poitiers, París, Estrasburgo, Salzsburgo, Viena, Cracovia, campo de concentración de Auschwitz, Berlín, Colonia, museo nacional de Port Royal des Champs, abadía de Solesmes, Burdeos y el santuario de Lourdes. Todos ellos, lugares donde el Papa dio sus primeros pasos como sacerdote y obispo.
"Los chicos no están todo el día rezando, ni tampoco de juerga. Tenemos misas diarias, catequesis, encuentros y serenatas, pero les damos bastante libertad en los tiempos libres para que disfruten de los lugares visitados", comentó el párroco. Esta es la tercera vez que la parroquia peregrina a Czestochowa; las anteriores fueron en los años 1991 y 2011.
