"Si tu fueras un bollicao me comería hasta el cromo", "¿Te estudio o te trabajo?"... Los piropos -estos, al menos- no valen, porque una mujer no debe permitir que se le trate como si estuviera en situación de inferioridad perpetua e inamovible. Tampoco vale ligar como se hacía en el año la polca, porque existen maneras de ligar bien, sanamente, en horizontal, desde la diversión y el respeto, teniendo en cuenta las necesidades de ambas partes, gozando en igualdad de condiciones, con consentimiento y no dando por hecho cosas, como explica el colectivo vasco "Beldur Barik", que ya el año pasado impulsó un taller de "ligoteo sano" que este año pone en marcha en la ciudad la plataforma "Avilés Libre de Agresiones Sexistas" y Les Rudes. El taller se celebrará el próximo lunes, día 20, a las 18.30 horas en El Parche. La participación será abierta y gratuita, sin límite de edad.

El objetivo del taller es "mostrar que se puede ligar de forma respetuosa". El taller será una especie de representación teatral con tres escenarios. En el primero participará un chico y una chica. Se interpretará un "ligoteo convencional". "En este caso se intentará enseñar cuándo un chico debe parar para no caer en el acoso. Una chica no tiene que sentirse molesta o buscar excusas absurdas para quitarse a un hombre de encima", explican los organizadores del curso de ligoteo saludable. Segunda representación: chica y chico. "La mayoría de las veces son los hombres los que dan el primer paso y queremos demostrar que nosotras podemos ligar, romper miedos e inseguridades. Se trata de hacer ver el empoderamiento de la mujer", ahondan. El tercer y último taller tendrá como protagonistas a una pareja formada bien por dos chicos o dos chicas, aún sin definir. "En cualquiera de los tres talleres una dinamizadora detendrá la escena y hará preguntas al público que den que pensar. Se trata de educar y de que el público interactúe", subrayan. La actividad está enmarcada en la campaña "Avilés libre de agresiones sexistas".

Las organizadoras de esta novedosa iniciativa que ya se desarrolló en algunas ciudades vascas pretenden mostrar que es posible mantener relaciones de forma respetuosa. Insisten en que "hay que aceptar el primer no como respuesta". "Todo no vale y de la misma manera que sí es sí, no es no", defienden. Porque hasta en las palabras bonitas de un piropo se esconden micromachismos callejeros.