Una visita guiada por el Avilés de los arquitectos Menéndez Camina, el próximo martes, día 6 de noviembre, servirá como colofón al ciclo de conferencias que desde comienzos de octubre ha venido celebrándose sobre la Asturias de Carlos II, etapa en la que vivieron y trabajaron los arquitectos avilesinos (padre e hijo). El recorrido partirá a las 19.00 horas del Centro de Servicios Universitarios de Avilés (calle La Ferrería) y estará guiado por Vidal de la Madrid, catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Oviedo y promotor del programa cultural, y su hermano, el historiador Juan Carlos de la Madrid. La participación en esta actividad es libre, gratuita y no requiere inscripción previa.

Asimismo, próximamente verá la luz un libro escrito por Vidal de la Madrid centrado en la vida y obra de ambos arquitectos. Su publicación servirá para conmemorar el tercer centenario de la muerte de Francisco Menéndez Camina, "El Mozo", que tendrá lugar en 2019, como anunció ayer la concejala de Cultura, Yolanda Alonso, en un acto celebrado en el Ayuntamiento y que contó con la presencia del profesor universitario. De la Madrid, por su parte, explicó cómo ambos profesionales consiguieron hacerse un hueco en el mercado de los siglos XVII y XVIII, supieron competir con los maestros montañeses y se convirtieron en impulsores del barroco decorativo.

A pesar de ser autores de edificios tan significativos como los palacios de Camposagrado y de Llano Ponte en Avilés, el Revillagigedo en Gijón o la capilla de Santa Eulalia de la catedral de Oviedo, los Menéndez Camina son unos desconocidos entre la ciudadanía. "Son responsables del barroco decorativo, sustituido por el arte clasicista, que despreciaba el barroco. Esto les hizo caer en el olvido hasta que en los años 70 el profesor Ramallo Asensio los recupera e identifica como los autores de la capilla de Santa Eulalia", relató el catedrático de Historia del Arte, para añadir que padre e hijo bebieron del barroco gallego, trabajaron en Galicia (monasterio de Lorenzana) y, además de palacios civiles y construcciones religiosas, estuvieron al frente de edificaciones porticadas de la calle Galiana, plaza de la Villa y La Fruta.