El mes de diciembre se presenta muy favorable para los profesionales del sector de la hostelería. Las reservas de grupos para celebrar las fiestas navideñas ya se acumulan en las agendas de los restaurantes y sidrerías de la ciudad, vaticinando unas fechas positivas en volumen de negocio para este colectivo. "Percibimos en la gente ganas de salir y celebrar, contamos con reservas realizadas con bastante antelación de grupos de compañeros de trabajo, de amigos y reencuentros familiares. Ante esto, creo que vamos a tener unas semanas de mucha actividad; no en vano, diciembre es un mes fuerte en la hostelería", señala Manuel Tiscar, con un negocio en la calle Ferrería.

Con una percepción igualmente positiva de la marcha del negocio en estas fechas se manifiesta Chus Zapico, encargado de un restaurante junto al límite con Castrillón, donde los comedores ya están completos para el día de Reyes y rozando el lleno para la Nochevieja. "Serán nuestras primeras Navidades (abrimos en enero de 2018) y estamos muy satisfechos con la acogida del público", comenta, para añadir que este establecimiento con cocina abierta de forma ininterrumpida desde las 14.00 hasta las 00.00 horas cuenta con varios tipos de menús para la elección de los comensales y en los que las carnes ocupan un lugar preferente. "La parrilla es nuestro fuerte", añade.

Los fines de semana, sobre todo de mediados de mes, un conocido local de la avenida de Los Telares colgará también el cartel de completo. Los grupos más numerosos se decantan por las espichas en esta centenaria sidrería, que también acoge reuniones más pequeñas, cuyos integrantes se decantan por menús acordados previamente y en los que la sidra es protagonista, apunta Rodrigo Suárez García.

Por su parte, un establecimiento ubicado en San Francisco afronta también este mes con abundantes reservas de grupos que Alfonso Muñumer detecta están integrados por un número menor de comensales que en años anteriores. El encargado del establecimiento avilesino señala que los clientes están optando principalmente por menús con platos para compartir, que otorgan un aire más informal a la celebración navideña y, además, resultan más económicos que los que incluyen platos individuales.