El Principado de Asturias asfaltará un tramo de la calle Santa Apolonia en los próximos meses. La alcaldesa, Mariví Monteserín, acaba de anunciar la reparación del vial entre el cruce con la calle Santa Cecilia y la rotonda de Los Canapés durante una visita al mural que acaba de terminar el artista ovetense Bastián Prendes en la medianera del edificio ubicado en el número 12 de la calle Santa Apolonia.

"Ha quedado muy bonito y es una forma de embellecer y de saludar con arte algunas de las zonas de Avilés que necesitan embellecimiento. Tenemos una ciudad guapa con unas entradas y salidas feas y hay que trabajar y contribuir poco a poco a que todo eso sea más bonito", afirmó la Alcaldesa. La idea del gobierno es seguir interviniendo artísticamente en más zonas de Avilés, aunque aún no está decidida la siguiente.

La obra realizada por Bastián Prendes es una actuación consensuada con la comunidad de propietarios de dicho inmueble y está enmarcada en el plan municipal de mejora estética de los accesos al municipio. Sucede así a la intervención llevada a cabo el año pasado por Daniel Muñoz en la medianera del edificio número 50 de la calle Llano Ponte, con vistas a la plaza de Los Oficios.

La propuesta de Bastián Prendes resultó elegida de entre tres candidatas por un jurado formado por Manuel Campa, concejal de Promoción de Ciudad; Andrea del Cueto, directora de Disciplina Urbanística y Planeamiento; Víctor Fernández, agente de Desarrollo Local del Servicio de Promoción Empresarial; y Benjamín Menéndez, profesor de la Escuela de Cerámica.

Bajo el título de "Adelante", la obra cuenta con una figura principal: una niña "de mirada intensa, con mucha fuerza y determinación, que al mismo tiempo transmite ternura e ilusión", y que "representa el comienzo de un tiempo nuevo", según explica el autor. Prendes señala que, "en un año en el que las reivindicaciones de las mujeres han sido protagonistas, se escoge a una niña como símbolo de estos nuevos tiempos, de voluntad e iniciativa de cambio".La obra incluye además diferentes elementos simbólicos que representan el patrimonio natural del entorno, a través de un paisaje de costa y de la presencia de diferentes especies. En cuanto a la fauna, cobra protagonismo la figura de un cormorán moñudo, especie que sufre un declive por causas humanas y que, como todo ave, es "símbolo de libertad y autosuficiencia".

Sobre la flora, el autor incluye una especie de interés protegida en el Principado de Asturias presente en las playas de la zona: el "Pancratium maritimum", conocido como "nardo marítimo" o "narciso de mar". Se trata de una flor que crece en sistemas dunares cuya continuidad está en peligro por la acción del hombre sobre estos parajes.

Un reloj de arena en primer plano y el atardecer de fondo completan una escena envuelta en una gama cromática cálida, que mezcla tonos pasteles e intensos, creando contrastes entre dos focos de luz principales: un reloj de arena en primer plano y el atardecer (o amanecer) de fondo. "La representación de este momento, con el círculo que preside la composición por detrás del cormorán, juega con la noción de cambio, de transición del día a la noche, o de la noche al día", afirma Prendes.