Un niño avilesino de seis años se llevó un buen susto el pasado sábado. Estaba haciendo una ruta de montaña en Cistierna (León) junto a sus compañeros de un grupo de scouts cuando se despistó y se perdió del resto. Solo fue una hora, pero los nervios estuvieron a flor de piel.

El pequeño se extravió cuando realizaba la ruta del Mirador de los Rejos bajo la supervisión de monitores de tiempo libre. Los cuidadores dieron la voz de alarma a las 15.40 horas al Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León. Inmediatamente alertaron a la Guardia Civil, que activó al equipo de rescate formado por el Grupo de Rescate Especial de Intervención en Montaña (GREIM) de Sabero, una patrulla del Seprona de Riaño y varios componentes de los puestos de Almanza y Boñar. Tras iniciar la búsqueda, los componentes del dispositivo localizaron al menor a las 16.30 horas en una pista forestal. Estaba en buen estado pero asustado y desorientado, según explicaron ayer fuentes del servicio de emergencia.

Los agentes trasladaron al pequeño avilesino al alojamiento Albergue Montaña Oriental de León, ubicado en la localidad de Cistierna, donde fue entregado a los monitores, sin que fuera necesaria asistencia sanitaria.

La subida al Mirador de los Rejos está calificada como "sencilla" por los conocedores del entorno y se llega desde Cistierna. La ruta discurre por el medio de un bosque de pinos y robles y en ella se pueden llegar a observar ardillas y corzos. También es una buena zona para recolectar setas. Una vez en el mirador, se puede contemplar el Valle de Sabero y algunos restos mineros. Esa excursión tiene una duración de unas tres horas y, según los expertos, es apta para todas las personas ya que carece de peligros y tiene poco desnivel.