La huelga en el transporte público de la comarca de Avilés, que ya ha tenido dos jornadas de paros parciales, entra hoy en un nuevo y más duro escenario: la convocatoria que apoyan CC OO y la UGT prevé un paro de 24 horas, que a efectos prácticos se extenderá entre las 6.00 y las 23.00 horas, la franja horaria en la que circulan los vehículos de la empresa concesionaria, la Compañía del Tranvía Eléctrico de Avilés (CTEA). La huelga sigue adelante tras haber fracasado ayer un intento de acercamiento de posturas que propició el Servicios Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (Sasec).
En línea con lo establecido por la Administración regional, la empresa ha previsto servicios mínimos del 25 por ciento de los servicios ordinarios. De este modo, la línea que tendrá mayores frecuencias es la L1 (La Luz-Piedras Blancas), con un autobús saliendo de cada cabecera a las horas en punto; la frecuencia habitual en esta línea es de 20 minutos. En el resto de líneas los servicios mínimos quedan del siguiente modo, con un intervalo medio de frecuencia de paso de tres horas: L4 (La Luz-Hospital), salidas de La Luz a las 7.20, 11.30, 16.00 y 16.30 horas, y salidas del Hospital a las 8.05, 11.00 y 16.30 horas; L5 (Avilés-Parque Astur), salidas de Avilés a las 9.00, 11.00, 17.00 y 18.00 horas, y salidas de Parque Astur a las 9.30, 11.30, 17.30 y 18.30 horas; L6 (Los Campos-Hospital), salidas de Los Campos a las 11.00, 12.00, 16.00 y 19.90 horas, y salidas del Hospital a las 10.30, 11.30, 16.30 y 18.30 horas; L11 (Piedras Blancas-Hospital), salidas de Piedras Blancas a las 7.20, 10.30, 13.30 y 17.30 horas, y salidas del Hospital a las 8.05, 10.00, 13.00, 17.00 y 19.00 horas; L17 (San Juan-Coto Carcedo), salidas de San Juan a las 9.15, 14.15, 15.15 y 19.15 horas, y salidas del Coto Carcedo a las 8.45, 9.45, 14.45 y 19.45 horas; y L18 (Avilés-Vidriero-La Luz), una sola salida Avilés a las 12.00 horas, y otra de La Luz a las 12.15 horas.
La razón de la huelga es el rechazo de los conductores de la CTEA a un sistema de videovigilancia instalado recientemente en los autobuses que les genera dos preocupaciones: que podría vulnerar la Ley Orgánica de Protección de Datos (LOPD) al grabar personas sin consentimiento y que podría ser usado contra ellos con ánimo sancionador.
Tras la reunión en el Sasec con los representantes de los trabajadores, finalizada sin acuerdo, la Compañía del Tranvía Eléctrico de Avilés (CTEA) lamentó en un comunicado que el citado comité insista en su rechazo al "sistema de seguridad" y puntualizó: "El 'Drive Cam' es un sistema de seguridad preventivo que está en funcionamiento en más de 2.000 autobuses de España, siendo el comité de la CTEA el único que ha planteado una huelga por su instalación, posicionándose en contra de la tendencia general del sector".
La compañía, así mismo, rechaza las acusaciones del comité de huelga de que el sistema tenga finalidad sancionadora. Por el contrario, asegura que su prioridad es "formativa". De hecho, añaden, "el 'Drive Cam' ya está en uso desde el pasado 1 de noviembre y, desde entonces, aunque ya se ha activado en varias ocasiones por diversas incidencias, no ha generado sanción alguna".
El presidente del comité de trabajadores, Ramón Luis Blanco (CC OO), mantiene su desconfianza hacia la empresa y la fundamenta, entre otras cosas, en lo ocurrido ayer en el Sasec: "Ofrecimos desconvocar la huelga si la empresa ponía por escrito que no utilizarían las cámaras de vídeo para sancionar a los conductores, pero se negaron. Si su intención es honesta, por qué esa negativa a ponerlo por escrito".
