Un hombre fue detenido ayer tras presentarse en casa de su expareja, de la que tenía una orden de alejamiento en vigor. El arrestado acudió al domicilio de su antigua mujer y trató de acceder a él. Ante esta situación, la víctima llamó a la Policía, que se personó inmediatamente en el lugar de los hechos y se llevó al infractor.
Según las últimas estadísticas oficiales, en Avilés hay 132 mujeres bajo vigilancia por violencia de género. Una de ellas está considerada con riesgo extremo; tres, con riesgo alto; 27, con riesgo medio; 53, con riesgo bajo y 48, con riesgo no apreciado. Se prevé que en próximas actualizaciones se relaje la calificación de la única mujer con riesgo extremo, pues su agresor ha ingresado recientemente en prisión. De todas ellas, 116 están protegidas de sus exparejas con una orden de alejamiento.
La UFAM (Unidad de Atención a la Familia y Mujer) es quien se encarga de coordinar estas vigilancias, a las que en los últimos días han incorporado una nueva mujer protegida -la número 133- por una orden de alejamiento que se ha trasladado a vivir a la comarca recientemente.
La vigilancia de estas mujeres es efectuada por agentes de la Policía Nacional y por la Policía Local. Hasta ahora, los agentes municipales se encargan de la custodia de 66 de ellas, mientras que los agentes dependientes del Ministerio de Interior hacen lo propio con 50.
