Los acosadores cambian de táctica en la red. El control policial sobre redes sociales tan populares como Facebook, Instagram o el servicio de mensajería Whatsapp ha hecho que los mensajes a través de las videoconsolas y la red social de clips de vídeo TikTok se hayan convertido en los últimos tiempos en dos de los principales canales de captación de menores de los pedófilos que actúan en internet Así lo advirtió ayer el agente de la Policía Nacional Alberto Vior en una charla que impartió en el colegio San Fernando a familias de los escolares. "La clave está en que los padres conozcan los peligros a los que se enfrentan sus hijos. Es la única manera de protegerles", asegura.
Tal y como habían detectando los agentes hasta ahora, los canales de captación online preferidos por los pedófilos eran Whatsapp, Facebook e Instagram, por ser las redes sociales que concentran un mayor número de usuarios. Si bien, la presión y el control ejercido por los agentes en los últimos tiempos ha hecho que este tipo de delincuencia se haya "reinventado". Tal como han podido contrastar los agentes, el servicio de mensajería de las videoconsolas y TikTok son dos de los espacios preferidos por los acosadores. El modus operandi es el siguiente: "Por ejemplo, una niña de 8 años sube un vídeo a TikTok saltando sobre la cama. Tiene el perfil abierto y más de cien seguidores. Uno de ellos le escribe y le dice: 'qué guapa eres, ¿por qué no te pones con un pantalonín corto como Shakira?' La niña lo hace y el pedófilo ya tiene el material", relata Vior, sobre una tipología delictiva muy habitual.
En cuanto a los casos de "grooming" (el engaño de un pederasta que es hace pasar por un menor para conseguir pornografía infantil) a través de los servicios de mensajería de las videoconsolas, el agente afirma que la forma de operar de los delincuentes es parecida. "Aquí el hilo de captación estrella es el Fortnite. Los pedófilos agregan a los menores tras coincidir con ellos en partidas y les dan conversación. Les hacen la pelota y van recopilando información sobre ellos. Cuando el menor les pasa algún tipo de material comprometido, el delincuente le amenaza aprovechando todos los datos que ha ido anotando sobre su víctima: dónde trabajan sus padres, dónde estudia... Y le coacciona para que le siga enviando imágenes y vídeos o para quedar en persona y abusar de él", relata Vior.
Otra de las problemáticas más habituales detectadas por los agentes es adicción de menores a los "likes". "Algunos chavales están tan obsesionados con conseguir 'me gusta' que llegan a colgar fotos indiscretas. Además, conocemos de muchos casos en que los adictos llegan a dejar de lado a sus amigos de toda la vida y se centran solo en su seguidores", afirma el agente sobre una dinámica cada vez más frecuente.
Para tratar de evitar este tipo de situaciones, Vior aconseja a las familias "conocimiento". "Del mismo modo que unos padres no le daría dejarían a unos niños a solas con un cuchillo ni le dejarían dormir con él pese a que le hayan advertido primero que se usa para pelar manzanas, no pueden permitirles que están totalmente volcados en el teléfono", explica el agente, quien considera vital fijar pautas y normas sobre el uso de estos dispositivos y prolongar los años de control de los móviles: "Detecto que se vigila más durante los años de Primaria que en los de la ESO, y para mí esta es la época más conflictiva, donde podemos meter la pata y amargarnos la vida por un vídeo comprometido".
