Los grabados de Picasso ya están en Avilés, en la cúpula del Niemeyer.

Marisa Oropesa, la comisaria de la exposición que se inaugura este próximo jueves, explica que el pintor malagueño probó "en la serie de los minotauros lo que sería el 'Guernica'".

La exposición mostrará, en concreto, una de las pocas series completas que existen en el mundo de "Suite Vollard", obra cumbre del grabado del siglo XX, perteneciente a Fundación Mapfre.

A esta serie, compuesta por un centenar de obras, se le suman los doce grabados de "El entierro del Conde de Orgaz", los nueve de "Les Cavaliers d'Ombre" y cuatro grabados más: "Retrato de Dora Maar" (1939), "Mujer en el sillón" (1947), "Cabeza de chica. Françoise" (1974) y "Jaqueline pañuelo negro vestido rojo" (1958). Por último, la exposición se completa con varios carnés del artista y libros de bibliófilo.