Alu Ibérica, la compañía resultante de la venta de la antigua Alcoa, prepara una segunda campaña de formación para la plantilla de la fábrica de San Balandrán. Se impartirá en agosto e incluirá nociones de soldadura eléctrica con electrodo, de carretillas y de plataformas elevadoras. "La primera edición de la formación en Avilés ha tenido muy buena acogida por parte de los trabajadores", aseguraron ayer desde la empresa.
El plan formativo, que se ha extendido también a la planta gemela de La Coruña, "tiene como objetivo mejorar las capacidades laborales de los empleados y se enmarca dentro de la hoja de ruta para la transformación de las plantas hacia un futuro eco-industrial", añaden las mismas fuentes. "La formación es un pilar esencial para el recorrido profesional de nuestros empleados y para ejecutar correctamente nuestro proyecto industrial de transformación hacia un modelo de aluminio sostenible. Gracias a estos programas conseguimos que nuestros empleados puedan tener un mejor futuro dentro de la compañía. Nuestro objetivo es seguir apostando por el talento interno", destacan desde la firma, fabricante de tochos y lingotes de aluminio y productos de pasta electrometalúrgica.
Grupo Industrial Riesgo anunció el 15 de abril pasado a las plantillas de Avilés y La Coruña que había comprado casi tres tercios de la empresa que, hasta el mes anterior, había pertenecido a Parter Capital Group, una sociedad que, a su vez, había adquirido las fábricas a la multinacional norteamericana Alcoa el 1 de agosto de 2019.
"Venimos para quedarnos, mantendremos los puestos de trabajo y vamos a impulsar el negocio para convertirlo en la referencia industrial del aluminio en el sur de Europa. Es lo que siempre quisimos hacer y por fin vamos a hacerlo", aseguró la compañía por medio de un comunicado de prensa el día 16 de abril, unas pocas horas después de hacerse cargo de la fábrica de San Balandrán.
