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Los colegios rurales y la concertada ganan alumnos tras la pandemia

Los centros escolares localizados en los núcleos urbanos de la comarca acusan la sangría demográfica y el miedo a los rebrotes

Alumnos en el colegio de Sabugo durante una actividad. LNE

Los colegios se preparan para la vuelta a las aulas más extraña de los últimos años. Ayer terminó el periodo de matriculación de los centros educativos de Avilés y Comarca, en los que un año más vuelve a quedar patente el crisis demográfica que atraviesa Asturias. Los alumnos que salen son más de los que comienzan, cuentan los directores de los centros, aunque en ninguno la cifra de alumnos es exacta. Esperan incorporaciones y cambios durante agosto y septiembre.

La tónica general es una leve pérdida, atribuida a la baja natalidad y, tal vez, al temor por el coronavirus. Los niños de 3 a 5 años no están obligados a ir al colegio; lo es a partir 6; y pudo ser un factor fundamental. Se da la circunstancia, además, que la zona rural puede ofrecer ahora más confianza a las familias. El Colegio Rural Agrupado (CRA) ofrece un modelo alternativo, alejado de los grandes núcleos urbanos y garantiza un número alumnos reducido por aula. Una opción a tener en cuenta que, casualidad o no, verá aumentado el número de matriculaciones. Así lo confirman en el CRA "Cabu Peñes", de Luanco, que superan las expectativas y rondarán los 82 alumnos, mientras que Illas-Castrillón contará con cerca de 158 alumnos. Una realidad que puede atribuirse a que sean los municipios con mayor número de familias jóvenes. En Gozón, El Vallín aumenta hasta llegar a los 377, El Canal mantiene sus alumnos, 120.

Por su parte, los colegios concertados avilesinos se mantienen en la línea de ejercicios precedentes. El San Fernando acogerá a 1353 alumnos hasta secundaria; el Santo Tomás, 301; el Colegio Principado, 212, más o menos lo esperado. El Santo Ángel esperaba un incremento y se cumplió: llegarán hasta los 770 alumnos, contando bachillerato. Los colegios públicos de la ciudad, por su parte, sufren una bajada de las matriculaciones. Llaranes cuenta con 11 niños de 3 en años, en total 110, algo menos de sus previsiones. La Luz mantendrá 274; el Enrique Alonso, casi los mismos, cerca de 425 alumnos. El Apolonar G. Hevia baja: tendrá 152. También el Marcos Torniello, que se queda con 167. Y en Sabugo habrá 200 niños.

En Castrillón, El Vallín contará unos 410 alumnos, 20 menos de los esperados en junio. El colegio público de Salinas tendrá 350 durante el próximo curso, mientras que en Raíces Nuevo rondarán los 100, "menos de 20 por clase", precisa su directora Yolanda López.

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