"Confío en que haya un juicio como manda la ley y el jurado popular demuestre que soy inocente". Lo afirma Alysson Luis de Oliveira, el acusado de matar a la prostituta transexual Paloma Barreto a puñaladas en un piso de citas de la calle La Cámara. Lo hace en una carta escrita con la misma mano con la que los investigadores sostienen que empuñó el cuchillo con el que asestó las 18 puñaladas que acabaron con la vida de Barreto el pasado 20 de septiembre. Con una caligrafía prácticamente impoluta, líneas perfectamente rectas y una mezcla de castellano y portugués, reitera en la misiva remitida a este diario una y otra vez la misma idea: "Yo no cometí el asesinato"
Desde su detención, De Oliveira, de nacionalidad brasileña, permanece en prisión provisional en el Centro Penitenciario de Asturias. Pasa los días en el módulo de Enfermería, al que fue asignado desde un principio por problemas psiquiátricos. Desde allí habla prácticamente todos los días con su familia en Brasil, con los que guarda muy buena relación. También con su abogada, Salomé Miranda, a quien llama con frecuencia para conocer las novedades del caso. Además de reiterar su inocencia, en la misiva también pide su puesta en libertad. "Llevo once meses privado de libertad. ¿Qué ha cambiado en este tiempo? Es la versión de uno frente a la de otro", insiste en la carta que se reproduce en esta página.
