Los hoteleros de la comarca coinciden en que la incertidumbre está marcando el inicio del mes de septiembre, en el que habitualmente baja el número de turistas en relación con julio y agosto pero no tanto como está sucediendo ahora. "Las reservas que llegan son de última hora, la gente tiene miedo por el covid-19", sostienen desde el sector. "No nos queda más remedio que adaptarnos. Empezamos septiembre con una ocupación del 50 por ciento", sostienen hosteleros de Avilés y Gozón; y en Castrillón las cifras son incluso menores.
"En septiembre estamos cayendo en picado, ya no es sólo el turismo, también han descendido y mucho los viajes de negocios; mucha gente teletrabaja", señaló Miguel Fernández que regenta un hotel en Piedras Blancas cercano al aeropuerto. "En Asturias hay tres meses de verano para el turismo, el resto del año los hoteles vivimos de los eventos deportivos, los congresos, los viajes de negocios y el covid-19 ha terminado con ello. En agosto llenamos, pero ahora ronda el 20 por ciento", añadió el empresario.
La suspensión de eventos deportivos es una de los motivos principales de estas perspectivas poco halagüeñas para el otoño. "Estaba programado el duatlón de Avilés para el puente del Pilar, ahora parece que se retrasa hasta noviembre. Todavía no tenemos nada concreto, así que la gente no puede hacer las reservas", señalaron desde un hotel avilesino.
Más eventos deportivos en el aire. Estos días se cancelaron unas pruebas de piragüismo en Trasona y Miguel Fernández ya suma "varias cancelaciones". "Estamos pendientes de otras actividades deportivas que todavía no sabemos si se harán y son muy importantes para todos los hoteleros de la comarca y de otras zonas de Asturias", agregó. El aplazamiento de bodas, comuniones y otras celebraciones familiares también suma en negativo, advierten desde el sector.
"En agosto tuvimos casi ocupación plena y septiembre suele ser un buen mes pero este año como están apareciendo rebotes del covid-19 hay mucha moderación a la hora de reservar", apunta Laura Rodríguez, gerente de un hotel en Luanco. Una vez que termina el verano, durante la semana siempre registraban una buena ocupación: "En los meses de invierno, veremos lo que nos espera. Nosotros tenemos abierto el hotel todo el año aunque, como todos cerramos durante el confinamiento", manifestó la responsable del establecimiento.
Los hoteleros coinciden en que el nivel de ocupación de los negocios de Avilés, Castrillón, Corvera y Gozón en agosto fue alto, en la misma línea de otros puntos de la región, y en la mayoría de los establecimientos rondando el lleno. Los empresario preveían que septiembre, al menos la primera quincena cumpliría unas buenas expectativas. "Septiembre, hasta ahora era muy parecido a agosto aunque con otro tipo de clientela", señaló Miguel Fernández. "Todavía hay movimiento en estos días", añadió Laura Rodríguez.
Otro tipo de establecimientos turísticos como los campings también notan el descenso de clientes este mes en relación con las mismas fechas de 2019. "Agosto fue muy bueno, septiembre empieza flojo, pero así empezó julio y luego hubo un giro radical", manifestó Marco Fernández, gerente de un camping en Castrillón. "Sí es cierto que el tipo de turistas de agosto no es similar al del año pasado. Descendieron los extranjeros y se incrementaron los catalanes hasta llegar al mismo nivel de los madrileños que son los que más vienen. También las estancias fueron más largas", indicó Fernández.
