Dos vehículos de Policía Nacional estacionados a la orilla del muelle del Niemeyer, el pasado sábado, por la mañana, nada hacían prever los acontecimientos sucedidos en los días previos en el interior del galeón "Andalucía". Coincidiendo con la jornada lluviosa, los responsables del buque optaron por suspender las visitas al público. Y ese mismo día, una vez que se tuvo conocimiento de la denuncia de una de las chicas contra el capitán por un intento de agresión sexual, comenzaron las investigaciones policiales. Los agentes revisaron el interior del galeón. Trataban de reconstruir el escenario donde se produjeron los hechos denunciados, pero también buscaban alguna sustancia química que hubiera sido empleada para anular la voluntad, como sospecha una de las chicas que fueron víctimas de la acción del capitán. Únicamente hallaron morfina en el botiquín del barco.