El programa festivo de agosto en Avilés arranca este fin de semana con el festival de música negra “La Grapa” en la pista de La Exposición de Las Meanas. Daniel García, conocido como Daniel Allman, organizador del festival, en una conversación con LA NUEVA ESPAÑA, explica las claves del evento y su esencia musical.

Esta es la VI edición del festival, pero, en un primer momento ¿qué fue lo que le llevó a traerlo a una ciudad como Avilés?

–Yo soy de aquí de toda la vida, pero llevo mucho tiempo viviendo fuera y cuando asistía a festivales de este tipo en otros lugares siempre pensaba en lo bien que encajaría este tipo de música y este ambiente en Avilés. Así que en 2015 no lo dudé y lo puse en marcha.

-La esencia de “La grapa” es la música negra,: el soul, el blues, el jazz… ¿Tiene alguna conexión con este tipo de música?

-Realmente me considero un aficionado a la música, llevo muchos años metido en este ámbito como DJ, he trabajo pinchando en muchos sitios. Luego empecé una carrera como promotor de sala y no salía de mi cabeza la idea de organizar una cita que pudiera acercar este tipo de música a la gente de manera popular, sin entrada, en formato gratuito. Y por eso Avilés es el sitio idóneo ya que su oferta cultural es muy amplia.

–¿Se pudo celebrar el año pasado el festival?

–Por desgracia el año pasado no se pudo celebrar bien. Víctor Velasco y yo hicimos dos conciertos de música negra para mantener viva la llama ,pero no podíamos considerarlo una edición de “La Grapa”. Esas circunstancias tan complicadas iban en contra de la esencia del festival, aunque lo entendimos.

–Este fin de semana “La grapa” contará con cuatro actuaciones, ¿podría contarme en qué consistirán cada una de ellas?

Para empezar la noche del viernes contaremos con “Nola Brass Band”, una banda de músicos madrileños que presentará su nuevo disco para dar rienda suelta a sonidos inspirados en Jimi Hendrix con su estilo propio “New Orleans”. Para cerrar la noche, continuará el show Shanna Waterstown, cantante del sur de los Estados Unidos que ha crecido con las influencias del gospel y nos regalará un recital en el que disfrutaremos al máximo con su voz. En la noche del sábado contaremos con una veterana banda de funk bilbaína, “The Cherry Boppers”, que, con sus instrumentos, difunden la música jazz , funk y en general los ritmos de baile antiguos y de raíz negra, la diversión está asegurada con ellos. Y, para cerrar el festival, el plato fuerte de la noche será “Big Daddy Wilson”, un músico americano afincado en Europa, pero cuyas raíces van ligadas a la música de iglesia y ofrecerá un show increíble.

–¿Cree que este tipo de música es suficientemente valorada aquí?

–Los apasionados de la música siempre hemos escuchado de todo. Lo que más caracteriza a “La grapa” es que siempre tiene que tener soul y funk, también el resto de estilos, pero esos dos son su esencia, es lo que consolida el festival. Hasta ahora no había una cita que congregara estos estilos principalmente. Creo que la gente cada vez se interesa más por esta música porque induce a la sonrisa, lleva al público a pasar un buen rato; esa es su magia.

–¿Por qué recomendaría a la gente asistir a este festival de música negra?

–Me gustaría transmitirles que si poco a poco vamos apoyando a la cultura, a la música en directo, las cosas irán volviendo a la normalidad y el futuro que ahora nos parece tan lejano, llegará. Además contaremos con todas las medidas de seguridad necesarias, se llevarán mascarillas, el espacio es grande y las distancias de seguridad se mantendrán, pero podremos estar de pie para bailar un poco. Tenemos la esperanza de que 2022 sea un mejor año pero por el momento creo que podemos conciliar salud y disfrute.