Debido a un problema mecánico en el buque de investigación oceanográfica “Emma Bardán” se retrasa hasta nuevo aviso el inicio de la campaña biológica “Juvena 2021”, orientada al análisis y caracterización de la población de bocarte juvenil.
El buque de investigación oceanográfica “Emma Bardán”, de la Secretaría General de Pesca, debería haber comenzado ayer la campaña “Juvena 2021” para el estudio del bocarte (anchoa) juvenil en el Golfo de Vizcaya, mediante la estimación de su abundancia y condición biológica, así como la caracterización de las condiciones ambientales. Esta información, que se recoge cada año desde 2003, permite predecir posteriormente el reclutamiento de la pesquería de la anchoa para la siguiente campaña.
Está previsto, una vez se repare la avería, que la campaña se desarrolle a lo largo de un mes, con la colaboración de científicos de la agencia tecnológica vasca AZTI-Tecnalia, que serán los responsables del desarrollo y supervisión científica de los trabajos.
Además de evaluar la abundancia de bocarte juvenil, los datos obtenidos van a ofrecer información sobre el estado de la condición biológica de esta especie y su comportamiento, en la medida en que puedan afectar al proceso de reclutamiento.
La campaña tiene también como objetivo la caracterización de las condiciones hidrográficas y de la abundancia y distribución de los componentes del ecosistema pelágico, tanto de los diversos tipos de plancton como de las comunidades de peces. De igual forma, se realizarán estudios para la caracterización de la distribución y abundancia de predadores superiores (mamíferos y aves marinas), así como de actividades humanas y basuras marinas.
Las evaluaciones se realizarán a través de prospecciones acústicas, mediante el uso de ecosondas que permiten estimar la abundancia, distribución y comportamiento de la especie.
