Y a la tercera fue la vencida. En el primer intento la botella rebotó en la pared y en el segundo tan solo salieron algunas gotas de espuma. Fue en el tercer intento cuando el vidrio tiñó “Veleros en la ría”, el mural conmemorativo de la rambla de San Juan, pintado por el artista Dan Miravalles. De hecho, fue su pareja, Raquel González, quien protagonizó la llamada botadura de barco real sobre la obra. “Voy a ser padre en 20 días y lo primero que haré será enseñarle el mural”, reconoce un orgulloso Miravalles, tanto por su obra como por su próxima paternidad.
A la inauguración del mural –situado en la parte de la parroquia de Laviana pegada a la ría de Avilés– acudieron varias decenas de personas. Entre ellas, el director de la Autoridad Portuaria de Avilés, Ramón Muñoz-Calero, quien hizo entrega de una placa de agradecimiento por su trabajo desinteresado al artista de la obra, Dan Miravalles, que además recibió un paquete de marañuelas.
La intención del vecindario es seguir decorando y rehabilitando la zona de la rambla de San Juan como aliciente turístico.
