La plantilla avilesina de la empresa de servicios telemáticos de comunicación Konecta, formada por 150 personas, protagonizó ayer una jornada de “cascos caídos”, un paro de 24 horas secundado, según fuentes sindicales, por al menos 130 trabajadores. “Hicimos huelga para reivindicar un convenio más justo y más digno”, manifestó la delegada sindical Ana Bayón, de la CSI.
“No puede ser que llevemos desde 2019 con el sueldo congelado cuando trabajamos en el sector que más beneficios obtiene año tras año. Nuestro salario a jornada completa (39 horas) está solamente a escasos 50 euros del SMI; mientras, la patronal se enriquece cada día más y más”, argumenta Bayón para justificar el paro, que se repetirá el día 13 de cada mes si la patronal no mejora su oferta a los sindicatos en el marco de la negociación del convenio sectorial.
El paro de ayer había sido convocado por CC OO y UGT, las centrales mayoritarias a escala nacional, y se adhirieron al mismo la mayoría de las organizaciones minoritarias para reforzar la unidad de acción.
