El "gatopardismo" o lo "lampedusiano" es, en Ciencias Políticas, el "cambiar todo para que nada cambie", paradoja expuesta por Giuseppe Tomasi di Lampedusa (1896-1957).
La cita de este 28 de mayo puede decirse que cumple parcialmente con el enunciado "lampedusiano". Cambio hubo, variado y en espacios diversos. Y esta comarca socialista que engrandecía la potencia del partido con los gobiernos de Avilés, Corvera y Gozón –los dos últimos en mayoría– y la presencia en un tripartito en Castrillón vivió anoche un giro esperado por muchos, los que hablan de "ola de derechización" y entre quienes eran conscientes del contexto de cambio.
Lo que queda por delante de aquí a la toma de posesión de los alcaldes, el 17 de junio, es priorizar acuerdos, los más favorables para que ciudadanía que ha depositado su confianza en unas u otras fuerzas, vea colmadas sus expectativas.
El político que representa la cara de un municipio es el encargado de administrar y exponer los intereses de la población. No obstante, existen personas que aún no tienen claro qué hacen los políticos, cuáles son sus acciones, ni a qué se dedican. Para despejar esas incógnitas quedan cuatro años por delante para trabajar desde el respeto y la sinceridad en solventar problemáticas y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. A la izquierda y la derecha les espera en esta comarca una ardua labor para convertirse en eslabón de progreso.