El Club Natación Santa Olaya se ha reforzado este verano con grandes nombres. Uno de ellos ya es una firme promesa de la natación española. Marcos Rodríguez Mesa (Granada, 1.997), es un fichaje de lujo para el club gijonés, que ve potenciado enormemente su equipo masculino de cara a la Copa de Clubes, donde buscarán el ascenso a División de Honor. Especialista en las pruebas de fondo, llega al Santa Olaya tras participar en los Juegos del Mediterráneo y siendo un "top cinco" nacional en los 400, 800 y 1500 metros libres. Su ambición no conoce fronteras y su calidad en la piscina le hacen soñar con estar en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020. El próximo 28 de octubre debutará con el Santa Olaya, pero antes formará parte de la concentración en altura con la selección española que tendrá lugar en Granada del 13 al 27 de octubre. Allí, coincidirá con su compañero César Castro y con nadadores como Mireia Belmonte.
- Para quien no le conozca aún. ¿Quién es Marcos Rodríguez?
-Soy un nadador que ha militado los últimos años en el Churriana. En 2013 llegó mi explosión a nivel internacional de la mano de Xavi Casademont, fui medallista europeo (plata en Bakú), en 2016 estuve entrenando con Fred Vergnoux en el Centro de Alto Rendimiento en Sant Cugat y el año pasado comencé mi preparación en la Residencia Blume de Madrid junto a Serafín Calvo. Ahora, por ciertos motivos he decidido cambiarme de club y comenzar una nueva etapa en el Santa Olaya. Estoy muy contento con el proyecto.
- ¿Qué le hizo iniciarse en la natación?
-Me inicié por mi hermano mayor, Antonio, que nadaba, mi madre me apuntó a natación y a partir de ahí, vieron que tenía una buena progresión en este deporte.
- Es una de las firmes promesas de la natación española de larga distancia. ¿Cómo lleva esa etiqueta? ¿Le gusta?
-(Risas). Bueno, lo llevo bien, la clave está en dar el callo todos los días y disfrutar al máximo del camino.
- En su trayectoria, ha ido dando pasos adelante. Desde Bakú 2015 hasta los Juegos del Mediterráneo de 2018. ¿Cúal es el próximo?
-Mi intención es hacer la mínima para el Campeonato del Mundo de Corea, que se disputará en julio. Más allá tengo otro objetivo, el más grande de todo, que es pelear por estar en los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020.
- ¿Un sueño?
-Sin duda ser olímpico. La olimpiada es la competición más importante y significativa para cualquier deportiva, decir que he sido olímpico es importante.
- Está en el camino de conseguirlo.
-Vamos a intentar entrar a través del 800 metros libre, creo que es la prueba indicada para conseguirlo. Es una marca que está a mi alcance, es una prueba que me gusta especialmente nadarla y en la que siempre estoy muy cómodo, sin duda es mi favorita.
- Se ha entrenado con técnicos de renombre como Fred Vergnoux (actual entrenador de Mireia Belmonte).
-Fue un año bastante duro. Aprendí muchas cosas, viví muchas otras, innumerables concentraciones y mucho tiempo en altura, quizás eché en falta algo más de tiempo para poder continuar con mis estudios.
- Ahora está con Serafín Calvo, en la Blume de Madrid. ¿Qué le hizo fichar por el Santa Olaya?
-Pues la verdad que al Santa Olaya lo conocía por Marco Rivera, que estuvo hace tiempo en el club. También por el que ahora es mi compañero César Castro, que fichó el año pasado por el club. Estuve participando en el Trofeo "Villa de Gijón" y me quedé encantado con el trato, la gente y el ambiente me enganchó por completo. Hablé entonces con José Rivera, le gustó la idea y tiramos para adelante. Estoy muy contento de que haya salido todo bien y de que me hayan acogido. Tengo ganas de empezar a nadar para el club y lograr resultados importantes.
- Ya sabe lo que es nadar en la piscina del club y ganar como hizo el pasado mes de mayo el Villa de Gijón.
-En 2015 también fui a competir con la selección española. El Trofeo lo organizan muy bien y este año fui sólo, como único representante de mi anterior club y me acogieron muy bien, siempre muy cercanos. Tuve la fortuna de ganar en la prueba del 400 y el 800 metros libre. Me sentí como en casa.
- ¿Qué espera de esta nueva temporada?
-La partiría en tres ciclos. La primera hasta diciembre cuando se celebra la Copa de Clubes en la que espero que podamos ascender a División de Honor, lo cual le vendría genial al club y es el objetivo de todos. La segunda mitad sería hasta el Open, donde tengo que pelear para lograr la marca que me pueda clasificar para el Campeonato del Mundo, que es en julio. Y el último bloque ya seria por intentar hacerlo bien en esa cita mundialista si me clasifico y, si no, tener un buen papel en el Campeonato de España.
- A nivel de club. ¿Ve un equipo masculino cualificado para el ascenso a División de Honor en la Copa de Clubes?
-Sí, de sobra. Tenemos un equipazo y vamos a lucharlo. Además nadamos en casa, creo que nos vamos a salir y lograr el ascenso a División de Honor. Espero un gran ambiente en las gradas, siempre he escuchado a la gente hablar de la Copa y de cómo lo vive la gente, con una gran intensidad. Va a estar muy bien (sonríe).
- No pudo ver competir a Marco Rivera. ¿Qué relevancia ha tenido en su trayectoria?
-(Suspira). Marco Rivera ha sido el fondista más destacado en España, siempre le han situado como un chico muy bestia entrenando y que se lo curraba mucho y eso a un fondista como yo se le queda bien grabada y lo identificaba con el Santa Olaya. No tengo la fortuna de conocerlo personalmente, pero me marcó a pesar de los años de diferencia que hay entre él y yo. Como referente tengo a Víctor Martín, excompañero en el Churriana y que fue olímpico en Río de Janeiro en el 200 libre.
- Antes de debutar con el "Oly" el día 28 en el Circuito de Madrid, se concentra con la selección española.
-Nos vamos desde mañana hasta el día 27. Son catorce días que nos van a venir muy bien de cara al Campeonato de España. Voy a bajar como una moto de allí porque la altura siempre viene bien.
- ¿Qué significa para MarcosRodríguez ser internacional?
-La verdad es que creo que es una de las cosas más bonitas que existen en el deporte. El poder representar a tu país no lo puede decir cualquiera, es una gran responsabilidad, pero me motiva mucho.
- ¿Cuál considera que es su punto fuerte?
-Diría que la constancia, me considero un nadador muy trabajador.
- Si no fuese nadador. ¿Qué sería?
- La verdad que no lo sé. Me dedicaría a estudiar, actualmente estudio fisioterapia, pero de momento no concibo nada que no sea entregarme a la natación.
