Un niño de 10 años tuvo que ser ingresado ayer en el Hospital Álvarez Buylla de Mieres tras haber sido atropellado por un coche en pleno centro del casco urbano. El accidente se produjo cuando el menor, en compañía de su madre, transitaba por un paso de peatones. El conductor del vehículo involucrado no frenó a tiempo y golpeó al pequeño con el frontal del automóvil. El niño salió despedido varios metros por el aire. En principio, su estado no reviste gravedad.

El accidente se produjo sobre las doce y media de la mañana en el paso de peatones de la calle Ramón y Cajal próximo al desvío con Alfonso Camín. Al lugar se desplazó rápidamente una patrulla de la Policía Local, que reclamó la presencia de un equipo sanitario de emergencias.

Los agentes abrieron diligencias contra el conductor, que alegó no haber visto al menor debido a un coche estacionado indebidamente. Pese al fuerte golpe, el niño atropellado, a la espera de todas las pruebas, no presentaba lesiones de consideración.