Pola de Siero,

Franco TORRE

El concejal de Deportes, Desarrollo Local y Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Noreña, Daniel González Rajó, ha sido condenado a 8 meses de retirada del carné del conducir, 720 euros de multa y 20 horas de trabajos en favor de la comunidad tras asumir la culpabilidad por haber dado positivo en un control de alcoholemia, en la madrugada del domingo. Rajó, que se sometió a un juicio rápido en Pola de Siero en la mañana de ayer, se vio favorecido por una reducción de un tercio de la pena al asumir su responsabilidad en los hechos.

El incidente, que ha generado una gran polémica en los días precedentes, tuvo un origen casual. Rajó fue detenido por una patrulla de la Guardia Civil cuando se dirigía a su domicilio, situado a las afueras de Noreña, al percibir los agentes que circulaba sin el cinturón de seguridad. Eran las 3.15 horas de la madrugada y el edil se encontraba en la cuesta de La Mariscala, un punto de la carretera de Ferrera situado a apenas cien metros de su casa.

Tras pararlo, los agentes le sometieron a un control de alcoholemia, en el que el concejal dio una tasa de 0,64 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, cuando el máximo permitido es de 0,25.

Ya desde un primer momento, Rajó, portavoz de URAS-PAS en el concejo chacinero, asumió la culpabilidad de los hechos, que calificó de «error», y descartó dimitir de sus cargos en el Ayuntamiento de Noreña al entender que «se trata de una cuestión personal». De igual manera, el edil remarcó las diferencias entre su caso y el de el ex alcalde del vecino concejo de Siero, Juan José Corrales, que dimitió tras estrellar su coche oficial y dar positivo en el posterior control policial. «No hubo accidente, ni estuvo implicado ningún vehículo oficial, ni fue en horario de acciones municipales», señaló a este respecto el concejal noreñense.

Fiel a esa estrategia, Rajó se presentó en la mañana de ayer al juicio rápido y asumió la culpabilidad de los hechos para minimizar la pena. Esto, unido al estrecho margen por el que el edil superó la tasa a partir de la que conducir ebrio pasa a tener consideración de delito (fijada en 0,60 miligramos de alcohol por litro de aire espirado), propició que el juez le impusiese la pena mínima contemplada por la ley, rebajada además en un tercio en todos sus puntos por admitir los hechos imputados.

A diferencia de la situación creada en Siero con la dimisión de Juan José Corrales, el positivo por alcoholemia de Daniel González Rajó no ha creado ninguna crisis de gobierno en Noreña. Ya desde un primer momento, el equipo de gobierno que preside el socialista César Movilla en el Ayuntamiento de Noreña cerró filas con el portavoz de URAS-PAS y apoyó su decisión de no dimitir de sus cargos. Este respaldo fue confirmado asimismo por el secretario general del PSOE local, Francisco Fernández, que expresó su satisfacción con el hacer de González Rajó y descartó consecuencias políticas por el suceso.

Integrado en el equipo del gobierno desde la ruptura en el seno de Izquierda Unida, producida hace ahora dos años, Rajó ha sido en este tiempo pieza esencial del gobierno de Movilla, y ha impulsado la concejalía de Desarrollo Local.