Un empujón a La Azucarera. La reunión entre el alcalde de Pravia, el socilaista David Álvarez, y el presidente del Principado de Asturias, Javier Fernández, sirvió ayer para llegar a un acuerdo para finalizar la rehabilitación del inmueble, de la que se encargará el gobierno regional. "Ahora vamos a ver cuál es la fórmula legal para hacerlo, si una cesión de uso o una cesión del edificio, según nuestros técnicos cualquiera de las dos opciones es viable pero hay que esperar a la decisión técnica", explicó Álvarez.

El regidor puso al presidente en antecedentes sobre la obra y las devoluciones que Pravia tiene que afrontar de las subvenciones regionales recibidas. En total, medio millón y medio de euros por no terminar la obra en el plazo previsto. Un reintegro que inició el Gobierno regional de Francisco Álvarez-Cascos y que continuó con el ejecutivo de Fernández, aunque reajustaron las devoluciones, ya que Foro exigía el montante total de la obra.

El Ayuntamiento afrontó el pago de 900.000 euros en 2016 y parece que cumplirán con el montante este mismo año pese a tener margen hasta 2020. "Está prácticamente liquidado, esperamos que en el primer trimestre del año se pague el resto y creemos que este esfuerzo que hemos hecho por devolverlo de una manera rápida, por encima de lo que nos permitía la ley, será valorado por el Principado". Así, Pravia pagará alrededor de 400.000 euros a principios del presente año, quedando aún 200.000 euros por abonar que, según el Alcalde, podrían pagar este mismo año.

El encuentro entre Álvarez y Fernández sirvió también para tratar la necesidad de suelo industrial del concejo, con el polígono de Salcedo ya agotado. El regidor solicitó al Presidente conectar mediante una carretera el polígono de la villa con el de Los Cabos, aún sin desarrollar. "Son más de cien mil metros cuadrados calificados como suelo industrial pero que necesita una conexión por carretera", precisó.

Por otro lado, y aunque no es competencia autonómica, el Alcalde praviano pidió a Fernández que intermedie ante la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) por Pravia. "Tenemos malestar con CHC, es un continuo pataleo porque tienen una dejadez total con dos de los principales ríos asturianos, Nalón y Narcea, mientras que nosotros apoyamos la consolidación de actividades económicas en torno al río, como son las plantaciones de kiwi de las vegas donde hay importantes inversiones, la Confederación los tiene como un desastre total y ya no es el caso de que estén limpios o sucios", aseguró indignado el regidor.

Álvarez abandonó el despacho presidencial optimista respecto a los tres temas tratados, sobre todo con La Azucarera, un proyecto emblemático que Pravia no acaba de sacar adelante.